Todo por mi primer amor...

Capitulo 1.

Recuerdo que desde muy pequeña no siento piedad por nadie, en mi escuela era mala, aunque buena estudiante era muy mala con mis compañeros, siempre he tenido problemas con mis padres, sobre todo cuan nacieron mis lindas hermanitas ah, mi vida se complicó por completo, en esos momentos empezaron los problemas serios, que solo hacían que yo me sintiera más indiferente, no sentía lastima, ni pesar por mi madre, ni mis hermanas... Así que simplemente mantenía encerrada en mi habitación, y cuando podía golpeaba a mis hermosas hermanitas, me daba risa su llanto, enserio me causaba demasiada gracia ver como lloraban y a veces sangraban, todo cambio y decidí irme cuando escuche a mamá hablando con papá.

- Roberto, Yandere solo nos causa problemas con su indiferencia y su odio – Dijo mamá con lágrimas en los ojos.

- Y... ¿Qué crees que debamos hacer?

- No se... Buscarle psiquiatra o algo parecido...

- ¡LO MEJOR ES QUE DESAPAREZCA DE SUS VIDAS! – Grite sin piedad, ya había decidido robarlos e irme de casa.

- P-p-p-pero Yandere ¿Qué piensas hacer? – Pregunto mi madre.

Solo ignore sus palabras y Salí corriendo a la habitación de ellos, sabia donde guardaban el dinero, Salí a comprar una maleta de viaje para empacar mi ropa y mientras salía de casa solo gritaba: "¡Me largo de esta casa!" "¡Me voy, me voy!". Salí y fui en busca de la tienda me compre una económica, regrese a casa y encima de mi cama, encontré una nota escrita por mi madre que decía:

"Yandere, está bien que intentes vivir sola, vívelo, experimenta, si quieres volver te recibiré con los brazos abiertos, como aun eres menor de edad te consignaremos dinero mensual"

No era tan difícil, no tenía que buscar casa, pues mi súper colegio le daba casa a los estudiantes que no tuvieran donde vivir, así que empaque mi maleta y la deje en el jardín, mientras fui a hacer el trámite, no tenía que llevar nada, ya venía amoblado, tenía más tiempo para mí, además no faltaba tanto para mi suicidio... Mis deseos de muerte no se comparaban a nada.