Te buscaré -Tom Felton-

Quince

Tom

Llegué a Irlanda con la esperanza de poder encontrarla para decirle que la amo y no la quiero recuperar pero para mi gran sorpresa ella ya no estaba aquí, al márcale iba hacia un destino desconocido, por lo menos para mi, Daniel no la dejo acabar de hablar conmigo; tal parece que tienen una relación.
Aunque siento un gran odio por mi antiguo amigo, creo que la gran parte de eso son celos.
¿Qué puedo hacer yo para encontrarla?¿Debería seguirla? Digo...ya esta con el, a mi no me a de necesitar. Creo que llegue a un punto sin retorno y lo mejor será volver.
Luego de pensarlo un rato, volví al aeropuerto decidido a tomar el siguiente vuelo de regreso a Londres.
Pagué el taxi y me apresuré a entrar, me dirigí a la primera fila, delante de mí había un chica que me volteaba a ver cada 5 segundos, eso me incomodo.
-¿Qué tanto me vez?- pregunte un tanto molesto
-Perdón si te incomode- se limitó a decir para seguir avanzando en la fila, no le conteste-¿cómo te llamas?-preguntó
-Tom-dije tangente
-Mucho gusto Tom-dijo sonriente-soy Cher
-Igualmente-
-¿Porqué tan serio?-no entendía porque tanta amabilidad conmigo si no la conocía
-Porque no te conozco-fruncí el seño
-¡Dios! Ni que fuera una asesina de tipos guapos-dijo con gracia- solo mírame, no peso más de 55 kilos- río
-Cierto-sonreí- pero nunca se sabe-
-Dime Tom, ¿a dónde te diriges?-
-Voy a de vuelta a Londres, ¿tú?-
-Igual-sonrío-¿Por qué vas solo?-
-Eres muy curiosa sabes-negué con la cabeza mientras soltaba una carcajada
-Lo sé, me lo dicen seguido-sonrío con la nariz fruncida
-Y un poco tierna-admití
-¡Espera! ¡No llevas ni diez minutos de conocerme y ya me coqueteas! ¡Oh mi dios!- agitaba las manos alocadamente, lo cual provocó mi risa
-No-reí aun mas fuerte-Vine a buscar a alguien que ya se fue-
-¿Ese alguien es importante para ti, no? -Es una larga historia-
-Tenemos mucho tiempo-dijo viendo la enorme fila frente a nosotros

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Unos 20 minutos después no encontramos sentados esperando la llamada de abordar, empecé a contarle mi historia con Jane, ella solo asentía y entrecerraba los ojos.

-Pasajeros del vuelo 511 con destino a Londres, Inglaterra favor de abordar por la puerta 2-
Tuve que parar de hablar y emprender camino hacia la puerta, la deje pasar primero.
-Muy bien por lo poco que te entendí, hasta ahorita, ella te dijo que te amaba, tu la mandaste a la friendzone y te escucho decir que te alejarías de ella porque salías con otra, ¿cierto?- dijo mientras buscábamos nuestro a cientos
-Todavía me falta contarte, 206-207, es aquí- abrí el compartimento de arriba y metí mi maleta, hice lo mismo con la suya
-Gracias-se acomodo en su asiento y yo a su lado-¿qué falta?-
-Luego de eso la bese-
-¿Como demonios? -preguntó confundía, las siguientes dos horas pasaron relativamente rápidas
-Y vine a buscarla porqué me di cuenta que no puedo vivir si ella, literalmente deje todo por ella-suspiré
-¡Hey! Por lo que me cuentas estoy casi segura que todavía te quiere, si no no te hubiera contestado el celular-me tomo de la mano y la apretó
-Fui un idiota con ella-
-Lo sé pero hay segundas oportunidades, no te des por vencido tan fácilmente-sonrío
-No se donde esta, esta con mi ex mejor amigo, que por cierto es su nuevo novio y como olvidar que nadie cercana a ella me quiere decir a donde demonios fue, creo que perdí esta guerra-
-Mira-suspiro pesadamente-por como lo dices y por cómo la describes, estoy casi segura que la amas-la mute abriendo exageradamente los ojos- y no me mires así, se te ve a leguas
Suspiré, tenía razón
-Ahora, ¿no dices que te enviaron una postal anónima? -
-si pero no creo volver a recibir otra-
-No seas negativo, mira llegando a Londres aremos lo que sea para investigar donde están-sonrío- a parte si te llego esa postal es porque quieren que estén juntos
-¿Me vas a ayudar?-pregunte sorprendido
-Claro-sonrío
Ahora no estaba solo en esto
-¿Porqué?- Ella no tenía ninguna razón
-Te contare una historia-se acomodo en el asiento- Hace un par de años, había una pareja de chicos, se podría decir que eran la pareja perfecta, un día el le dice a ella que se tiene que ir a Londres un tiempo a luchar por su sueño, le promete que volverá, ella le prepara una hermosa despedida, una fiesta en la playa con todos sus amigos y familiares, esa noche se van a la casa de ella y hacen el amor con locura, al siguiente día lo va a dejar al aeropuerto, cada semana le manda una carta y le marca todos los días, parece que todo va muy bien, el mes siguiente pasa rápido pero algo cambia en ella, sube de peso, tiene nauseas, antojos repentinos, un día en la preparatoria se desmaya, la llevan al doctor; recibe una noticia devastadora, ella esta embarazada, mientras tanto el sigue en Londres, ahora la llamaba una vez a la semana a lo mínimo, ya no llegaban cartas, cuando lo intento contactar, nunca respondió, marcaba día y noche, hasta que un día se dio cuenta de algo, fue la ultima vez que lo llamó, el tono no fue el típico del buzón: El número que usted marcó no existe. El cambio su número, ahí lo entendió todo, así que tuvo que decirle a sus padres lo que pasaba, los cuales no lo tomaron muy bien pero la apoyaron en todo, hoy en día ella vive en un pequeño departamento, trabaja en la tarde y estudia en la mañana, su pequeña tiene 3 años y se la pasa preguntando por su padre. Ella no sabe que decirle.-Sin darme cuenta empecé a llorar junto con ella, era obvio que la chica de la historia era ella
-¿Eres tu?-pregunte sin prensarlo
-Es mi hermana menor-dijo bajando la cabeza-Vive con pequeña y la apoyo en todo, cuando se embarazo tenía 16 años, su novio 17; nunca mas supimos de el, lo que voy a hacer a Londres es buscarlo-
-Te ayudare-
-Gracias-
-Los encontraremos- sonreí