THAT PLAYBOY IS MY HUSBAND ✏ Jongin×Kyungsoo

CAPÍTULO 2.

"¡Mamá! ¡Mamá! ¿Adivina qué? Sabes qué, olvídalo, ¡No lo adivines! ¡Sólo te lo diré! ¡Conseguí un empleo! ¡Tengo uno!" cierto chico con sus ojos abiertos gritó mientras corría hacía la cocina, "¡Y comienzo el lunes!"

Su madre giró a verlo mientras limpiaba sus manos recién lavadas en su pañuelo de flores.

"¡Fantástico! ¡Quién lo hubiera pensado!" dijo ella con asombro.

Él buscó por un vaso con agua sonriendo con orgullo mientras sacaba una silla de la mesa del comedor y sentar su regordete trasero allí.

"Ese es mi Kyungie" dijo ella sonriendo débilmente y frotando suavemente sus cansados ojos.

KyungSoo frunció el ceño y se dio cuenta de que probablemente su madre estaba cansada por el trabajo, que estaba prácticamente escrito en su cara, en letras grandes, gruesas y negras. "¿Mamá? Déjame cocinar esta noche."

"No, está bien. Puedes ayudarme a lavar los platos cuando haya terminado" dijo su madre dándole una generosa sonrisa. "Así que, ¿qué hay de esos tres?" preguntó su madre apuntando a los amigos de KyungSoo in la fotografía sobre la mesa.

"¡Ellos van a trabajar conmigo! ¡Juro que soy suertudo!" KyungSoo dijo sonriente a su madre.

Su madre sólo respondió un "uh," como si estuviese olvidando algo importante. Eso era común en su madre, siempre olvidando cosas. Puede ser un poco frustrante al inicio, pero KyungSoo ama a su madre de todos modos. Siempre han sido su madre y él, desde que él tenía siete años. Su madre sacrificó demasiado para hacer de KyungSoo feliz y él trató lo mejor de sí mismo para crecer sin ningún tipo de complejos.

Luego de que su padre murió, KyungSoo y su madre lucharon para salir adelante cada día. Su madre trabajaba duro, y era un pago acomodado. Todos los días su madre caía o colapsaba del cansancio y fatiga del trabajo. Ella tiraba el dolor y lo reemplazaba con alegría. Ahora ella trabaja como secretaria en una de las más grandes compañías de la ciudad.

"Siempre olvido lo que iba a preguntar" su madre tomó asiento en frente de él sonriendo tristemente mientras colocaba el pañuelo de flores sobre la mesa, "¿Dónde vas a trabajar, Kyungie? Se suponía que iba a preguntar esto primero" ella dio una débil risa.

"Está bien, mamá" él le dio una sonrisa tranquilizadora antes de continuar a responder la pregunta de su mamá. "El trío y yo vamos a trabajar en una floristería"

La madre de KyungSoo sonrió orgullosa, ella sabía que su hijo era un chico honesto y se sentía bendecida al tener un hijo que creciese hasta ser un hombre fuerte incluso después de las dificultades.

KyungSoo nunca fue el niño más social para ser honestos, así que verlo trabajar juntos a sus amigos era maravilloso. El era muy callado por naturaleza, así que por supuesto era difícil para él hacer amigos; pero él tenía tres que eran muy cercanos a quienes confiaba plenamente.

El primero es Byun Baekhyun. Baekhyun es lo opuesto a Kyungsoo, él es un alma libre que no tiene miedo de hablar, él no tiene problemas en hacer amigos y amar a los demás, especialmente a KyungSoo. Ellos se conocieron en su primer año de escuela y han sido amigos cercanos desde entonces.

Como sea, incluso si Kyungsoo tenía a Baekhyun, él seguía siendo el más callado de todo el colegio. Naturalmente esto atraía el bullying. Su apellido siendo "Do", dejaba que los abusadores se divirtiesen llamándolo "Do-do", o ellos le silbarían a él por sus grandes ojos que lo hacían ver como un búho. Eran burlas infantiles, pero aún así herían a Kyungsoo y él lo odiaba más que nada.

Ahí fue cuando Park Chanyeol entró en escena. Al principio ambos, Kyungsoo y Baekhyun, estaban un poco asustados de Chanyeol como todos lo estaban; su altura era un tanto intimidante ya que era uno de los más altos en la escuela, pero al final Kyungsoo y Baekhyun terminaron siendo amigos del gigante, y descubrieron que no había nada que temer de él, y que de hecho tenía un corazón muy suave. El alto había cambiado su actitud totalmente, cuando se trataba de los dos chicos más bajos, cuando estaban juntos todo era risas y risitas tontas. Cuando alguien se burlaba de los más bajos, el gigante callaría efectivamente a quien quisiese burlarse de sus amigos.