Falling again.

2.

Nos vamos acercando a la casa de Cody, como buen millonario, la casa es enorme.
Entramos y el alto volumen de la música no me deja escuchar a mi amiga, por lo que he entendido ha ido a buscar algo para beber.
Veo lejos la rubia melena de Cody y me acerco.
Cuando llego veo a Cody, Cameron, James, Jordan y un chico moreno y alto que no se quien es.
- Hola! -habla Cody sobre la música.
Miro hacia la barra a ver si veo a Paola.
-Y.. ¿tú quién eres?
Me giro y compruebo que es el mismo moreno que repito, no se quien es.
-Dudo que te importe.
-Tal vez si.
-Tal vez no. -contesto y voy a buscar a Paola.
-Miiiaa toomaa. -dice y me ofrece una copa.
Ya va borracha la perra.
La cojo y bebo de ella, que más da.
Bebo y bebo, sinceramente no se cuantas copas llevo.
-Hola.
-¿hola? -respondo y me giro y veo al chico de antes.-¿Quién eres?
-¿No te acuerdas?
-Si, bueno, me refiero a que como te llamas.
-¿Y tú? -Pregunta el moreno.
-¿Perdona?
-Perdonada.
-Joder, ¿Cómo te llamas?
-Austin, Austin Maslow. -Contesta al fin.
-Encantada.
-¿Y tú?
A mis oídos llega la melodía de mi canción preferida, Drag me down.
Viene Paola y me coje de la mano, nos dirigimos a la barra y subimos a bailar como si no hubiera un mañana.
Pasan las horas y con ellas las botellas de cerveza y los mojitos.
Decidimos que es hora de irnos cuando el cielo comienza a clarear.
Me dirijo al coche pero.. mierda estoy muy borracha.
-Iremos andando Pao. -Informo.
Paola camina hacia la carretera, yo le sigo.
Caminamos mientras cantamos canciones de One direction y Gemeliers.
Escucho el pito de un coche y justo después veo un ferrari rojo pasar rápidamente a nuestro lado.
-Desgraciado, casi nos matas! Ojalá pilles sida! -Gritamos ambas al unísono.
El ferrari frena de golpe y de el baja un chico, que por cierto no está nada mal.
Pao y yo nos miramos.
-Buen culo. -Decimos las dos a la vez de nuevo.
-¿Sólo me vais a decir eso?¿"Buen culo" y os vais a ir?
-Si. -Respondemos por tercera vez a la vez.
-Porque tengas buen culo no significa que valla a tener algo contigo, aquí la única fresca es mi amiga. -Digo con palabras casi inentendibles.
-Claro.. OYE!.. Rubia tenías que ser! -Replica Pao.
El chico pone cara rara y se va.
Seguimos cantando hasta que llegamos a casa de Paola.
Rápidamente quedamos dormidas.