Zorra no te lo lleves

Parte 8 ¡No puedo hacer esto!

Llegue a mi casa, estaba cansada, me recosté en mi cama, oí sonar mi celular eraun mensaje de  Nick

N

-Hola, deberíamos vernos sábado, me la pase muy bien estando con tigo

Se me acelero el corazón, no sabía que responder

J

-Claro me encantaría, entonces quedamos el sábado- Fue lo único que dije

Debí decirle algo más no sé, un " también me la pase muy bien con tigo", solo pensar en él se me acelera el corazón, tengo muchas ganas de verlo , me saco de mis pensamientos el sonido de mi celular, era mi amiga "Anna", conteste

-Hola, como estas- Mi voz se oía un poco ronca

-¿Te pasa algo?-Me pregunto muy intrigada, se hizo un pequeño silencio

-No, no pasa nada, es solo que Nick me invito de nuevo a salir- Oí como mi amiga gritaba al otro lado del celular-Tranquila, relájate- Me reí

-Ok ya me relaje- se río-Voy a ir a tu casa y me cuentas todo ¿Vale?

-Vale

Paso media horay Anna llego a mi casa, parecía como si hubiera corrido ya que estaba muy agitada

-Me das un vaso con agua, por favor -Me dijo Anna muy educadamente, fui a la cocina y serví un poco de agua en un vaso y se lo pase a mi amiga, ella tomo un gran sorbo.

-Cuéntamelo todo, no omitas nada, exactamente qué fue lo que te dijo-Me dijo, con una mirada muy curiosa, respire profundo y le conté todo lo que me había dicho Nick, sentía como mis mejillas se enrojecían.

-Bueno eso es todo- Le dije a mi amiga, no se me quitaba la sonrisa, por más que quisiera que mi sonrisa boba se fuera no se iba, siempre que recordaba el día con Nick, y todo lo que me había dicho, tenía esa sonrisa boba. Pasamos unos minutos hablando y mi amiga se fue de mi casa.

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La semana paso muy rápido, no me había dado cuenta, pero en toda la semana no había pensado en David.

Llego el sábado, estaba emocionada, me levante de un brinco de la cama y me fui al baño a tomar una ducha, salí del baño, me fui a mi habitación y mire mi armario para mirar que ponerme, no sabía que ropa elegir, escogí tres blusas, eran mis favoritas, una era negra de velo, escotada, sin mangas, otra era morada, ceñida al cuerpo, sin mangas, con esa blusa mostraba la bonita figura que tenía, y la otra era blanca, con la espalda destapada, también era ceñida al cuerpo, opte por la blanca, me puse un jean negro, unas vans negras y un blazer negro, me aplique rímel, sombras suaves y labial.

Paso un tiempo y oí el timbre, mire por la ventana, era Nick, el corazón se me acelero, abrí la puerta.

-Hola-Le dije, me temblaba la voz

-Hola-Me dijo con una sonrisa, él se oía relajado, llevaba una camisa blanca las mangas las tenía recogidas, encima llevaba un chaleco gris, un pantalón negro, y unos zapatos negros, el cabello lo tenía alborotado, se le veía todavía húmedo.

-Pasa- Le dije, realmente no tenía muchas ganas de salir, me sentía un poco mal

-¿Que tienes estas pálida?-Me pregunto-Deberíamos quedarnos, si te sientes mal-Asentí con la cabeza- Te voy a preparar un té-Me senté en el sofá que estaba al lado de la puerta

-Mira- Me paso el vaso con té

-Gracias-Dije, Nick se sentó al lado mío, no se movió de su puesto hasta que termine el té

-Ya que no vamos a salir, deberíamos ver una película-Dije con voz quebradiza

-Muy bien-Dijo él con una sonrisa, me levante del sofá y puse una película. Permanecimos en nuestros lugares, no nos movimos mucho, me sentía incomoda. Se acabó la película, apague el televisor. Sentí como Nick me cogía de la cintura y me besaba el cuello, me ericé, me volteé, Nick estaba muy cerca de mi rostro, podía oír sus latidos, se acercó y me beso, me vino un recuerdo vago de David y me separe de Nick.

-Lo siento no puedo hacer esto- Dije con voz nostálgica, él sonrió

-No importa-Dijo con una sonrisa- podemos ser amigos-Asentí con la cabeza, intente sonreír pero fracase; se levantó del sofá, abrió la puerta y se fue.

Creía que con Nick iba a olvidar totalmente a David, pero me equivoqué, por más de que quisiera olvidar a David no podía, su recuerdo seguía vagando en mi mente, el sonido de la puerta me saco de mis pensamientos, abrí la puerta, no lo podía creer que hacia aquí, todavía no quería hablar con él, todavía no me sentía lista

-Hola ¿podemos hablar?-Me dijo David