LOVE is LITTLE

¿ El Fin?

Brunella y Marcos estaban completamente enamorados, pero acaso ¿todo era felicidad?
Si bien es cierto ambos estaban enamorados, ya eran hombre y mujer y sus planes estaban hechos con todo especificado, sin punto, de corrido y por supuesto con el empeño que ambos ponían.
Si embargo no todo era felicidad en la relación, ya que luego de todo lo sucedido vendría el gran bajón.

Ya con más de un año. Y con tantas cosas vividas tuvieron que separarse un poco ya que con la universidad de Marcos sumado a la pre de Brunella no tenían tanto tiempo como cuando ambos se conocieron. Sin embargo Marcos amaba demasiado a Brunella y no dejaría que los metros de separación derrumbaron una relación de casi dos años.
Sin embargo por parte de Brunella la desconfianza comenzó a roer sus pensamientos y no dejaba de pensar en todas aquellas chicas que solo se dedicaban a ver a Marcos.
Marcos no era un chico feo, era guapo y muy coqueto con gran personalidad, lo cual derretía a todas las universitarias y chicas de su barrio. Y por supuesto a Brunella le comenzó a fastidiar ese tipo de cosillas.
Como ya estaba mencionado Marcos en su antes de Brunella era un chico bastante coqueto, que no se moría por ninguna chica mas aun le gustaba todas y a la vez ninguna. Un prototipo de hombre mujeriego sin llegar a tanto.
Lamentablemente habían chicas que no se quedaron satisfechas con el tiempo que disfrutaron a su lado sino que querían volver a estar con aquel chico tan aclamado y por supuesto todo un galán.

Fue entonces el comienzo de un duro momento para la pareja que hasta el momento se preguntaba amor.

"Hola mi amor, como estas? " - dijo Marcos a través del auricular de su teléfono celular.

"Hola bebe, bien en casa y tu?, de seguro con alguna de tus amigas esas de la universidad"- dijo ella algo fastidiada.

"Jajaja deja los celos, estoy en el descanso tomando una taza de café, no estoy con nadie " - dijo él tratando de darle confianza.

"Si, como no"- dijo ella poniendo en tela de juicio la palabra de su pareja.

"Bueno si no me crees, no puedo hacer mas, entrare a clase nos vemos. "- dijo él totalmente fastidiado.

"Bueno ve, Bye te amo. "- dijo ella tan cortante y coleando el teléfono. Los celos y la desconfianza predominaban sus pensamientos.
Él sólo pensaba en que la amaba y no deseaba pelear, y se propuso creer que esa conversación no existió para no comerse la cabeza con angustias o disgustos.

Pasaron los días y el estaba concentrado en sus estudios, con amigos y mirando de lejos cualquier chica que se le apareciese. Hasta que apareció.

En su universidad hay mucha gente que el ni prestaba atención, sin embargo luego de aproximadamente un mes de ingresado, una chica se le acercó.

Me puedo sentar a tu lado? - dijo la señorita de cabello largo y rojizo, tan blanca como la leche y con sonrisa de oreja a oreja.