CONOCIDOS

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La adrenalina corría por mis venas como si de un río corrientoso se tratara, mi reparación agitada intentaba llevar con dificultar el tan deseado oxígeno que mis pulmones demandaba con urgencia pero ahora incluso el respirar parecía quemar mi pecho haciendo que sea una tarea dolorosa, incluso pude sentí aquel líquido tibio y carmín resbalar por mi rostro hasta ver caer grandes y gruesas gotas de sangre al suelo formando un pequeño charco.

La deplorable condición en la que ambos nos encontrábamos era alarmante pero esto no terminaría hasta que uno de los dos cayera o muriera. Ella siempre fue un hueso duro de roer, no me dejaba de sorprender lo resistente que podía llegar a ser, la única razón que aún nos mantenía en pie era el hecho de ser consciente de que está era nuestra batalla final, aquí todo concluiría, aquí llegaría a su fin una rivalidad de décadas y generaciones.

Aquí se pondría a prueba la voluntad de fuego

El viento soplo suavemente moviendo en su vals las hojas de césped manchadas de sangre, pude apreciar que el paisaje ya no era ni la mitad de hermoso que hace unos minutos pues las flores estaban pisoteada y arrancadas así como los árboles yacían quemados o simplemente destrozados, había sido en algún momento un bello lugar para tan cruel desenlace.

— ¿Qué pasa?— la mujer frente a mi se enderezo demostrando su altanería a pesar de estar casi molida — ¿Es que ya no te quedan fuerzas para seguir?—

— Me atrevo a decir que estoy en mejores condiciones que en las que tú estas.— esboce una leve sonrisa al ver su ceño fruncido al verse ofendida — Solo necesitas el golpe de gracia.— como una fiera arremetió contra mi en una serie de golpes que mi ojos sharingan me permitió esquivar.

— ¡Quédate quieta de una maldita vez! — exclamé en el momento que aprisione su cuerpo en una llave desde su espalda. — Ya dije que no quiero pelear contigo.— sus manos se agitaron con desesperación al sentir la presión en su cuello impidiendo el pase de aire, en un intento de lastimar con sus largas uñas mi rostro.

— ¡Lo que dices es una gran y asquerosa mentira! — me aleje de ella cuando el filo de un kunai rozo mi rostro provocando una herida. Con un rápido movimiento logré derribarla al suelo, mi mano se posó sobre su cuello generando presión, pude ver como sus profundo ojos negros me miraban con fiereza mientras batallaba para liberarse. Entre la briza que golpeaba mi rostro se percibía el olor a pasto mojado y madera quemada, así como el refrescante olor a frutos rojos, inolvidable de alguna u otro forma pues emanaba siempre de ella a pesar de estar sucia y con sangre por todas partes.

Ay niña impura ¿Qué haré contigo?
¿Dejaré que vivas?
¿O acabaré con la mancha y gran error de los Uchiha?

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— Mi nombre es Sessly Uchihaku.— la arrogante sonrisa de mi rostro se desvaneció lentamente. — Espero que no estés intentando clasificar para los exámenes chunni, no creo que sea lugar para alguien tan débil.—

— ¿Qué has dicho? — solté en un rugido.

— Alguien tan débil que no pudo proteger a su propio clan.—

— Voy a borrarte esa maldita sonrisa del rostro.— una mano se posó en mi hombro en el momento que estuve a punto de golpear su rostro sin importarme que fuera una chica, me detuvo con un fuerte apretón que lastimó esa zona de mi piel.

— Espera Sasuke, no creo que sea momento para empezar un alboroto.— hablo Kakashi sin siquiera vernos ya que sus ojos estaban puestos en la lectura de su libro. — ¿No crees que sería más interesante demostrarle tus habilidades dentro del campo de batalla? Piénsalo, en los exámenes chunni podrás enfrentarte a ella y nadie los detendrá.— aparte su mano de mi de mala gana.

Sangre Impura | Sasuke Uchiha |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora