La bufanda de Heather (POV Adam).

The last day.

Cuando Heather salió de su habitación Adam se pone de pie y se dispone a hacer sus maletas ya que en menos de una hora debía abandonar la clínica.

Transcurrido la hora, Adam se hallaba sentado en unos sofás del hall de la clínica con su nueva bufanda en las manos, esperando que llegara su hermano a recogerlo. No podía creer que Heather le haya regalado una prenda con tanto significado para ella, mientras seguía perdido en sus pensamientos no se percato de que su hermano Steve venia entrando por las puertas del lugar.

-Hey dam!

Adam sale de sus pensamientos al escuchar el apodo que su hermano le había puesto de niños.

Levanta la cabeza y sonríe a verlo casi cerca de él -. Steve, hermano no te veo hace tiempo-. Lo abraza afectuosamente y se dan palmadas en la espalda.

- El mismo tiempo que llevas en este lugar dam -. Se separan y exclama.- pero bueno, por fin ya te dieron el alta y ahora sos libre... ¿listo para irnos de este lugar?

Adam se entristece ya que eso significa no poder ver más a Heather, así que simplemente asiente y estrecha más fuerte en sus manos la bufanda.

Una vez que Steve firmo los papeles correspondientes para poder sacar a su hermano partieron a su apartamento en el auto de esté.

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Adam se encontraba acostado en la cama de su nuevo apartamento luego de haber cenado con su hermano unas pizzas que había encargado, por mucho que quisiera sacar de su mente a Heather no podía hacerlo ya que sentía como si la estuviese olvidando, así que simplemente se dio la vuelta, suspiro y se dispuso a dormir.

Martes 25 de Octubre

Adam había hecho muchas cosas ese día; entre ellas no dejar de pensar en su amada Heather. Hizo actividades como salir a correr, comer algo, comprar, ver televisión con su hermano pero por nada del mundo lograba sacarla de su mente por alguna razón mientras más quería olvidarla, su amor hacía ella se fortalecía.

Miércoles 26 de Octubre

Esa mañana Steve le propuso a su hermano dar una caminata para despejar su mente y poder hablar de todo el tiempo que habían perdido. Adam encontró ese momento ideal para poder hablar sobre sus sentimientos hacia Heather, le contó absolutamente todo sobre ella, como se habían conocido, los momentos juntos, sus peleas, reconciliaciones, todo. Steve solamente asentía feliz por su hermano ya que pensaba que Heather tenía los mismos sentimientos hacia él.

Una vez terminada su charla, Adam salió de la cafetería con dirección al parque.

Caminaba tranquilamente por el camino del lugar viendo a las personas cuando de repente sintió un aroma que él conocía muy bien. Acelero un poco su paso y se encontró con un sendero de flores que sin dudas emanaba el mismo perfume de Heather.

Comenzó a recordarla nuevamente y sus ojos se cristalizaron al pensar que estaría haciendo, ya la extrañaba demasiado y no aguanto más.

Esa noche se durmió abrazando fuertemente la bufanda contra su pecho y pensando en cuando volvería a verla.

Jueves 27 de Octubre 17:37

Ya estaba decidido. Ese día la volvería a ver.

Adam estaba sentado en la isla de la cocina después de haber cenado. Pensaba en lo hermosa que debería estar Heather, habían transcurrido tres días, así que se levanto de su asiento, tomó su chaqueta, se puso la bufanda y salió con dirección a la clínica. Realmente no sabía a qué hora Heather se desocupaba, solamente quería verla sin importarle cuanto le tocara esperar.

Había llegado al aparcamiento de la clínica y rápidamente divise su auto.

Me acerque y me dispuse a esperarla lo que fuera necesario, tome asiento y los minutos transcurrieron.

-Adam, ¿Qué haces aquí a estas horas? – Escuche nuevamente su dulce voz preguntándome.

Rápidamente me puse de pie y levante la mirada -. Hola Heather, ¿Acaso no te alegras de verme? – Sonreí

-Sí, claro que me alegro. Solo que me sorprende que estés aquí – Me sonríe. Hace mucho que no veía su sonrisa.

-Vine a verte, solo a eso. Y claro a pedirte que me acompañes -. Subo a su auto, ya no aguantaba mucho tiempo hay afuera, quería llevarla a algún lugar – Vamos, ¡sube! Quiero que demos un paseo.

Ella sube y toma asiento en el lado del piloto.

-No puedo acompañarte. – Frunzo el seño, no me gusta escuchar eso. – Cam me está esperando.

Realmente no me importa quién la esté esperando, la quiero solo conmigo.

-No te pregunte si querías -. Uso un tono para que se dé cuenta que no bromeo

-Está bien.- finalmente accede.- acompáñame a lo de Camille, hablaremos ahí sí quieres.

-Bueno, vayamos con Camille – le digo.

Heather pone en marcha su auto y nos dirigimos hacia la casa de Camille.

Una vez que llegamos bajamos del auto y nos acercamos a la puerta. Heather toca el timbre y segundos después aparece Camille por la puerta lanzándome una mirada extrañada.

Ellas intercambian algunas palabras y Heather me presenta a su amiga. La saludo e ingreso a su casa.

Cuando entro a su casa pierdo la razón. Ya no aguanto ni un segundo más sin confesarle mis sentimientos a Heather, tomo su brazo y el de Camille obligándolas a subir al piso de arriba. Cuando diviso la primera puerta, entro con ellas y la cierro con el seguro, las obligo a sentarse en unas sillas que había por la habitación, parándome frente a ellas.

-Heather, en estos días no pude dejar de pensar en ti, te extrañaba demasiado y lo único que podía hacer para sentirte cerca era oler esta bufanda una y otra vez – le digo con suficiencia - ¿Sabes por qué?

-No, Realmente no lo sé.

- Porque te amo Heather, por eso – le digo con ira, ya no aguantaba – y se que tu también me amas.

-No, tu no me amas Adam.- Eso me confunde. Claro que la amo – y yo tampoco te amo, solo estas confundido - ¡MENTIRA! ELLA SI ME AMA.

-Sí, tú me amas Heather. Me amas, por eso me regalaste tu bufanda. Tu amas esta bufanda –Sonrió, señalando mi cuello.- y si me das algo que amas, es porque me amas.

-No, te la regale porque quería ser amable. NO TE AMO ADAM, JAMAS TE AMARE. ¡Por favor comprende eso! – "No es cierto"

-Claro que me amas, ¡deja de mentir! – Grito y le doy una bofetada.

-NO LA TOQUES ANIMAL.- Escucho que me grita Camille.

-¡Tú te callas! – Exclamo y le pego un puñetazo en la cara con fuerza haciendo que comience a sangrar.

Me sorprende escuchar llorar a Heather e intento hablarle para que se tranquilice, pero ella no me responde ni reacciona. Simplemente sigue llorando y ya no se qué hacer.

Veo que Heather controla su llanto y escanea la habitación para seguidamente mirarme con unas de sus encantadoras sonrisas.

-Tienes razón Adam. Yo te amo y te di mi bufanda por ese motivo.- "¡Sí! Yo sabía que ella me amaba"

-¿Lo dices en serio? – Sonrió ampliamente, entusiasmado porque va a estar conmigo.

-Sí, y realmente te he echado de menos en estos tres días.

-Lo sabía. Sabía que me amabas. No era posible que no sea así, tú me amas y yo te amo, es como debe ser. – Me pongo de rodillas y apoyo mi cabeza en sus piernas. – Te amo Heather, no quiero que nos alejemos nunca. No quiero alejarme de ti, nadie podrá hacerlo nunca. Te amo.- Pronuncio alegremente mis palabras, quiero estar toda mi vida con ella.

-Nadie nos separara Adam. Nadie.

El escuchar eso me hace feliz, pero de repente siento un golpe en mi cabeza y siento que de apoco voy perdiendo el conocimiento. Esas fueron las últimas palabras que logre escuchar diciéndome.