Capítulo 2

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El funeral fue rápido , realmente no me apetecía seguir viéndolos ahí dormidos sabiendo que nunca más iban a despertar.

Me faltaban tres meses para cumplir los dieciocho y mientras transcurra el tiempo debía vivir con mi hermano hasta ser independiente.

No me gustaba ser la carga de otro, me sentía como una niña que necesitaba una niñera, pero si discutía me iban a obligar igual.

***

— No es necesario que hagas esto — dije

— Sabes que lo haré igual , soy tu hermano y debo velar por ti — me respondió Marco

Miré a mi al rededor, era medio día y el sol ya provocaba un efecto agobiador, estábamos en la plaza de la cuidad, la gente iba y venía como si nada les molestara.

Se escuchaba el sonido de las máquinas trabajar en la nueva y gran remozada municipalidad. Era tan enorme con parado con el resto , que todo se veía como unas miniaturistas al lado de el.

Lo bueno de vivir aquí, es que puedes caminar por las calles sin tener que sujetar tu bolso, Tomé era una ciudad pequeña de no mas de cincuenta y dos mil habitantes y aun así lo tenía todo, no me podría imaginar vivir en otro lugar.

— Será mejor que vallas a recoger tus cosas — habló mi hermano.

— ¿Y tu a donde irás? — le pregunté

— A buscarte una nueva cama para que duermas claro — sonrió

— Yaa...

Antes que diera un paso, Marco se interpuso en mi camino con la expresión preocupada.

— Juliette, sabes que a mi me afectó tanto como tu, si pudiéramos sentarnos a hablar ...

— No hay nada que hablar — traté de decir mientras me intentaba zafar de el aunque claro que fue imposible.

— Juliette ... — exhaló — mejor lo solucionamos que estés en casa.

Comencé a caminar hacía el norte murmurando para mi misma.

"Yo ya no tengo casa"

***

Llevaba unos veinte minutos caminando y ya había llegado a lo que ... solía ser mi casa.

La policía aun tenía los separadores con la palabra "PELIGRO" por el rededor de mi casa. Había un tremendo espacio en la pared, en donde el automóvil impactó con ella. comencé a avanzar hacia allí y me percaté que a unos par de metros de distancias habían dos furgonetas negras. Extrañas pero aun así no lo suficientemente sospechoso para causar un alboroto.

No me importó hací que entre de todas maneras a la vivienda. Todo era un caos, escombros por todos lados, nylon que cubrían las cosas y el mismo vacío que sentí el día del accidente.

Entre a mi habitación ... bueno, lo que solía ser mi habitación, para llevar mis maletas, todo iba bien,  hasta cuando sentí que alguien me oponía resistencia por la parte de atrás, mi instinto fue inmediatamente pegarle en los bajos y hacer que se retorciera pero este tipo era como un gorila con una fuerza garrafal.

Grité y por todos mis medios quise salirme de su agarre, otro gorila mas apareció de la nada y me tomó de las piernas y comenzó a llevarme a la salida.

El sol me impactó de golpe, miré a mi alrededor en busca de alguien pero casualmente hoy, ningún vecino se asomó a mirar.

Una de esas furgonetas negras estaba estacionada frente a mi casa con las puertas abiertas, el chofer le daba instrucciones a los hombres que me sujetaban, intentaron adentrarme al auto pero me resistí con todas mis fuerzas.

Preparé mis pulmones para hacer un grito de ayuda pero antes de que lo lograra, uno de esos sujetos agarro un pedazo de no se que cosa y me golpeó en la parte atrás de la cabeza.

No sentí el dolor al instante, pero si el mundo parecía querer desaparecer a mi alrededor. Intenté dar un paso pero me tenían bien afirmada.

Antes de que agarraran y me metiera al furgón, la oscuridad vino a mi y ya no volví a ver la luz.




Segundo Capítulo de secretos , que espero que sea de su interés.

para mayor información la Ciudad de Tomé realmente existe y se encuentra en la XVIII región de Chile

Espero verlos pronto .

adiós


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