Capítulo 2

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13 Agosto

Mis padres decidieron que un cambio de ambiente sería perfecto, y también porque mi padre consiguió un trabajo nuevo ya que en el anterior le pagaban muy poco y consumían mucho su tiempo, el creía que debía darnos la mayoría de su tiempo a nosotras no a su trabajo, pero a mi madre y a mi no nos importaba tanto eso ya que en los ratos libres de mi padre todo era perfecto.

Mi madre se llama Clarissa Greench  es una mujer hermosa de cabellos rubios y largos, de tez blanca, de estatura promedio (1.67cm), delgada, a la cual ama estudiar, estudio  contabilidad y le hubiera encantado seguir sus estudios, pero entonces salió embarazada de mi y fue lo que la detuvo.

Mi padre se llama Gorge Greench, mi padre es el hombre más guapo del mundo, tiene su cabello entre castaño rubio, es moreno claro, con una sonrisa como de perlas, el siempre sabe como alegrar los momentos por muy tensados que estén el sabe como sacarnos sonrisas, se la pasa mimandonos a mi madre y a mi, es un hombre perfecto que de hecho mide 1.70cm, siempre que salimos todas las mujeres se giran hacia él y no las culpó ya que es un hombre muy bueno y si tal vez tenga su errores pero como dice mi madre "El amor TODO lo disimula".
  
Y yo Anastasia Greench, tengo 17 años, estudiante de preparatoria y el orgullo de mis padres, yo tengo el cabello como el de mi padre y mi piel igual a la de mi madre, saque la sonrisa de ambos y mido 1.68cm en mi vida todo es perfecto ya que mi vida casi siempre es una fantasía en mi antiguo colegio los chicos nunca me interesaron, ya que todos eran igual de patéticos y mi madre creía que tal vez en este colegio cabía la posibilidad de que yo por fin saliera con alguien y yo espero que no, aun no es el momento en el que tenga que llorar por un chico estúpido, para mi en los únicos amores en los que estoy involucrada es en de los libros, en los libros todos los amores eran perfectos ya que siempre daban su vida por amor, como en Romeo y Julieta, o cualquier amor así tan perfecto y sincero, así que yo esperaba encontrar un amor así aunque sabía que era tonto.

PRIMER DIA EN EL COLEGIO.

Mis padres decidieron que hoy sería un buen día para regresar a la escuela y bueno la escuela es muy grande y bueno parece buena, espero todo salga bien en mi primer día.
-Todo va a salir bien cariño, no te preocupes- Me dijo mi madre dándome un beso.
-¿Venimos por ti a la salida Ana?- Dijo mi padre sonriendome.
-Si papá por favor, bueno me voy pff, espero todo salga bien, los amoooo.
Me gire al colegio y comencé a caminar.
Yo era el centro de atención todos se giraban así mi y era horrible lo único que quería era que la tierra me tragara o que llegará un omni y me llevará hasta mi casa y se escuchaba como murmuraban "Ya viste a la nueva" o "Mira su ropa" hay no eso no me gusta. Llegó la directora o eso parece por su forma de caminar y todo eso, interrumpiendo mis pensamientos me dijo
-Bienvenida, ¿Cuál es tu nombre jovencita?

Me quedé congelada un momento sólo unos segundos y regrese, -Perdón, me llamó Anastasia pero todos me dicen Ana.
-Muy bien Ana, yo soy la directora Elsa Coronado, sigueme por favor.
Y sin esperar respuesta se giró y comenzó a caminar, comencé a seguirla hasta que llegamos a la dirección, abrió la puerta y me hizo señas para que entrará y comencé a caminar su oficina era color Rosa tenía unos sillones de piel muy excéntricos, sus tacones se escuchaban por todo la habitación.
Sacandome nuevamente de mis pensamientos me dijo sonriendo, aunque de hecho muy fingida la sonrisa.
-Toma asiento por favor, te voy a dar tu horario de clases y en las aulas en las que debes de estar.
-Si muchas gracias.
-Espero que te pongas al corriente y cualquier cosa que necesites o alguna queja sobre compañeros o maestros, puedes contar conmigo, ahora le pido alguna alumna que te de un recorrido por nuestra institución.
-Por supuesto, muchas gracias y le prometo que en unos días estaré al corriente.
-Eso espero.
Me dijo sonriendo, se levantó de su asiento y comenzó a caminar hacia fuera de la dirección, cerró y unos segundos después entró una alumna, su aspecto me inspiraba confianza, su estatura era de 1.50cm más o menos, era un poco morena, de cabello negro y ondulado, usaba unos anteojos muy pasados de moda y un tipo de ropa muy anticuado.
-Hola me llamó Paty, bueno me llamó Patricia pero todos me llaman Paty, ¿Y tu como te llamas? ¿De donde eres? He escuchado que eres de muy lejos, ¿Cierto?.
Tantas palabras me revolvian, hablaba mucho y parecía tímida, bueno "No se debe juzgar a un libro por su portada" Pero bueno me simpatiza mucho.
-Yo me llamó Anastasia pero puedes llamarme Ana.
Le dije estrechando su mano.
-Bueno la directora me pidió que te diera un recorrido, sigueme.
Y sin esperar respuesta se giró y comenzó a caminar sin parar de parlotear. Después de unos minutos terminamos el recorrido y las clases ya habían comenzado y ella aun no paraba de hablar y hablar y hablar.
-Me prestas tu horario, te llevaré a tu aula para que te presentes.
Busco mi horario en mi bolsa y después de unos minutos muy largos y incómodos encontré mi horario y se lo ofrecí, lo tomó rápidamente, se acomodó sus gafas y comenzó a mover su cabeza al compás de su lectura. Me regresó mi horario y comenzó a caminar sin decir nada, lo cual era algo raro.
-Nos toca en la misma clase, que bien, ¿No lo crees? Es una oportunidad de conocernos un poco más, me encanta la idea de estar juntas.
¡Lo sabía! Era demasiado para ser verdad, ¿Nunca se cansa de hablar o que?
Entramos a nuestra primer clase que por cierto estaba a punto de terminar.
-Profesor ella es Anastasia.- Dijo Paty mostrándole una sonrisa al profesor.
-Usted siempre interrumpiendo señorita Rose, Bienvenida señorita, es un poco tarde para presentarse así que tomé asiento junto a Kozara por favor.
Asenti con la cerveza y me gire hacia el grupo de jóvenes que estaban detrás de mi.
Una joven levantó la mano dándome a entender que ella era mi nueva compañera de asiento.
-Soy Kizora profesor.- Dijo la joven de cabello negro con una que otra mecha morada y de tez muy muy blanca.
-Como sea, tomé asiento ¿Señorita?.
-Ana.
-Si por supuesto, Ana tomé asiento.
El transcurso de la puerta hacia mi asiento fue incómodo, todos me miraban y murmuraban, así que comencé a caminar más rápido hasta llegar a mi asiento.
-Hola, soy Kizora.- Me dijo con una sonrisa simpática.
-Hola soy Ana.
-Señoritas no son horas de presentaciones, estamos en clase.
En ese momento todos se giraron hacia nosotras haciendo que me sonrojara.
-Lo siento.- Me dijo Kizora regalandome una sonrisa la cual era de disculpa.
Después de unas horas ya estaba en mi habitación acostada y candada, por el viaje y por mi primer día, mis ojos ya comenzaban a cerrarse y mi mente para tranquilizarse por la tarde tan incómoda me decía "Tranquila, mañana será diferente".
Y en ese momento mis párpados por fin cerraron.

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