Just Tonight 「2min」

Una noche

Hola. Quise compartirles este oneshot a las amantes del 2min. Lo escribí una noche mientras oía Just Tonight de The Pretty Reckless, si no la han oído les recomiendo que lo hagan es muy buena.

El reloj que estaba en la mesita de noche marcada las 2:37am, como pudo, dejo el cuerpo de esa persona caer justo en el colchón, suspiro y le ayudo a quitarse un poco la ropa, afuera hacia frió por las lluvias que habían estado amenazando la ciudad, pero con la borrachera que el otro se cargaba no iba a sentir nada de frió. Le bajo el cierre de la chamarra de cuero que llevaba y la deslizo por los brazos de aquel que en estos momentos se movían y balbuceaba cosas sin sentido, le quito los zapatos y abrió la cama para meter el cuerpo del de cabellos negros dentro de ella.

¿Como es que había acabado de niñera? Pues por culpa de su estúpido amigo Key, le había dicho que quería una fiesta de cumpleaños con solo sus amigos más cercanos ¿Y qué hacia el otro? Iba y llamaba a casi toda la escuela, él no era tan sociable y a más de la mitad de aquella fiesta ni les reconocía, le había pegado cuando se dio cuenta de la barbaridad que había hecho, pero el otro simplemente le palmeo la espalda y le dio una bebida de un color algo extraño.

Trato de tranquilizarse y socializar un poco con la gente, en dos ocasiones había tenido que huir de alguna chica que le invitaba a bailar, pero él amablemente les había rechazado diciéndoles que no sabía bailar, mentira si bailaba de las mil maravillas, lo que no quería era bailar con ellas, un suspiro salió de sus labios y termino su bebida, se había cansado, estaba aburrido y no había nadie con quien platicar a gusto, se acercó a la isla de la cocina para dejar la copa que tenía entre los dedos, se acercó a Key entre la multitud, para avisarle que se iba a ir.

-Hey, me largo, estoy cansado y mañana tengo trabajo -le dijo a su amigo cuando llego a su lado.

- ¿Qué? No te puedes ir, aun no llega tu regalo -el chico rubio que respondía al nombre de Key, le paso un brazo por los hombros, para decirle aquello al oído.

-¿Qué regalo? ¿De qué hablas? -No entendía eran más de las 12 y nadie le había dado nada, solo habían ido para beber y ver con quien follaban.

-Ahí está, justo a tiempo

El menor se giró y llevo su vista al lugar donde su amigo veía buscando una enorme caja o algo por el estilo pero lo que sus ojos cafés vieron le dejo con la mandíbula caída y los ojos como platos, se volteo rápido, parecía niño asustado.

-Disfruta tu regalo, esta noche está soltero -y sin más se giró dejando al castaño solo con el corazón latiéndole a mil.

-¡Feliz cumpleaños! -una mano se estrelló en su hombro y el aroma de aquel se le metió por las fosas nasales, amaba ese perfume, se había comprado uno para rosearlo por ahí y pensar en él, si alguien se enteraba iba a tener serios problemas por su actitud obsesiva.

-Gracias -trato de sonar lo mas apacible, pero lo cierto es que estaba nervioso -bueno yo ya me iba, disfruta la fiesta -antes de poder dar siquiera dos pasos una mano se cerró en torno a su muñeca.

-No te vayas -el otro le miro casi con... suplica, o tal vez su atolondrada mente lo imagino, el chiste es que con solo esas palabras bastaron para que él no se quedara junto a él, mientras el de cabellos negros, bebía grandes cantidades de alcohol.

Y así fue como llego a esto, a cuidar de él, porque claro el idiota de Key no había querido llevárselo a su casa, ese idiota ¿Que creía que pasaría? ¿Que se atrevería a contarle sus sentimientos, y que el mayor por ser su cumpleaños le empotraría en la pared para darle se "regalo"? y como conocía a Key estaba seguro que esos eran sus pensamientos.