Capítulo #1

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Había una vez, una pequeña niña... No, esto no esta bien, porque esta historia no es sobre cualquier niña, esta es la historia de Emily. Todo esto paso hace mucho tiempo, en un pueblo que no existe... Al menos, ya no.

Emily tenía 5 años cuando esto ocurrió, y era hija única de el alcalde y de una famosa modelo. Sus padres, siempre ocupados, no le prestaban atención a su hija, en realidad, nadie lo hacía. Las criadas, los hombres elegantes con trajes caros, las mujeres maquilladas y ataviadas con largos vestidos, los otros niños. Todos la habían olvidado.

Nunca hubo abrazos, ni cuentos a la hora de dormir, lo único que tenía Emily, era una creciente pila de inertes juguetes, que no podían llenar el vacío que se había instalado dentro de ella. Los juguetes no podían espantar a los monstruos del armario, ni admirar sus dibujos, o mas lo importante: amarla.

Emily hizo todo lo posible para ser una niña buena. También hizo todo lo posible por no ser una niña tan buena. Pero no importaba, de igual manera, nadie le prestaba atención. No podía hacer nada.

Una noche Emily se asomo por la ventana de su dormitorio, y vio una estrella muy brillante. Emily se pregunto si de verdad era una estrella, o un ángel que se había quedado despierto después de su hora de dormir. Ella recordó haber leído en un libro que si le pedías muy amablemente a una estrella un deseo, tal vez se cumpliría.  

Emily cerro sus ojos y deseo con toda la fuerza de su infantil corazón tener un amigo que jugase con ella, un amigo que la protegiese de las criaturas de la oscuridad, un amigo que la quisiese. Las estrellas no le condecen deseos a todo el mundo, pero Emily pidió ese deseo tan dulcemente, que no le negaron el deseo. 

"Por favor... yo solo quiero un amigo... por favor" rogó la pequeña Emily. Y al la medianoche, o unos minutos antes dependiendo del reloj, el deseo de Emily se hizo realidad.

EmilyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora