Indiferencia

No estás sola

Hola, ¿Cómo te sientes? ¿Te encuentras bien? ¿Me escuchas? -Decía una dulce voz-

Tn: ¿Qué Pasa? ¿Por qué no puedo ver nada? -Me preguntaba a mi misma, estaba adolorida. Intentaba responder a aquella voz, pero no había respuesta de mi parte, ¿Qué estará pasado?

No entendía nada, era inútil que intentará levantarme, puesto que no podía lograr hacer el más mínimo movimiento, pero eso no quitaba la extraña sensación de una cálida manta alrededor mío, además de que no estaba sola, de eso estaba segura, era como si alguien estuviera junto a mí, ¿Esto era una broma de mal gusto?

Ya no podía aguantar mucho más, el mareo no cesaba, de hecho empeoró, tanto que sentí como si toda la rabia, la tristeza y la indiferencia me inundarán, pero sabía que todo pasaría rápido, por más raro que parezca por fin después de tanto tiempo estaba bien.