*Narra peshoh *w**
Estaba en mi sillón, mirando fotos del bestia,y pensando en lo lindo que sería al menos tener un pequeño beso, o un cálido abrazo suyo. Sin embargo, por más que lo deseara, era imposible. tenía que decírselo, pero me aterroriza la idea de que se pueda enojar,o irse en "mala" conmigo.
Me puse de pié y me fuí a mi pieza, ahí me senté nuevamente en mi cama y lo llamé temblando sin cesar,esperando que no se notase en mi voz. Me contestó muy cortante:
-Aló?- dije sonriendo,aunque no pudiera verme.
-Hola ¿que querí? Sabes... estoy algo ocupado.
-Nada, solo necesito decirte algo, que me ha estado preocupando un poco,pero aun así tienes que saberlo.
-Rápido,te dije que estoy ocupado.
-Eh... no, si no tienes tiempo, mejor no. Puedo esperar.
No respondió...
-Chao, perdón por molestar....
Justo antes de que colgara, se escuchó la voz de una mujer,preguntando:
-Que pasó "mi amor"?
Sentí que moría un poco por dentro, incluso sabiendo que entre nosotros no había "nada".
Y así pasaron unas 3 semanas sin hablar con él, estando ocupado.Cuando recibí una llamada suya.
Contesté, y sin saludar, sin decir nada, me dijo:
-Así que te gusto... ¿eh?
-S...si, eso te quería decir la otra vez pero pensa...- No me dejó terminar de explicar nada.
-Ya lo sabía, se te nota.
-Perdóname, pero no pude evitarlo, tú sabes, los sentimientos.
-Por qué? Está bien, la mina con la que estaba, era una amiga,y justamente hablábamos sobre ti, dijo eso para molestarte... pero en realidad sí... te quiero, es más, creo que siento una atracción bastante fuerte.
-Ah si?...- no acababa de creer esas palabras.Una alegría me inundó por completo y quería correr, gritar, y abrazar a mi rapero gordito :3 Quería que me lo repitiera una y mil veces hasta aceptar que me quería, casi tanto como yo a él.
-no, si es broma weon... Obvio que sí, pero necesito hablar contigo seriamente sobre esto, creo que no es bueno y si te soy sincero tengo miedo.
-De qué?
No me respondió, y sólo dijo:
-Chao, cuidate porfa. Te aviso cuando nos vemos. Ah! y mandale saludos a tu familia, haha.
Un vuelco en el alma. Sólo quería hablar con él y aclarar todo cuanto antes.
El esperado día llegó... con frío y café.
Nos sentamos, uno frente al otro con las orejas y la nariz congeladas, muy serios dispuestos a estar un largo rato hablando, como una reunión de negocios. Me hizo gracia pensar en eso, sólo nos faltaban los ternos y maletines.
Largo rato hablamos de cómo cada uno sintió todo, de nuestro futuro si fuésemos pareja y para finalizar, con un abrazo y una frase al oído que jamás olvidaré:
-Aunque nos gustemos, creo que esto no puede ser.
Lo acepté.... Y la amistad quedó intacta.
