La Apuesta |Zayn Malik| (EDITANDO)

CAPITULO 27 -TODO CAMBIARÁ

Narra ____:

En cuanto abrí la puerta Zayn corrió hacia mí y me inundo de su aroma por medio de un fuerte abrazo, se acercó hacia mi oído y pronunció un "perdón", probablemente estaba arrepentido por todo lo que me había hecho en el día pero aun así eso no quitaría que yo siguiera molesta con él.

-No te preocupes –intenté no ser tan dura.

-Necesito contarte un par de cosas –su voz sonó triste.

-habla entonces –pronuncié con un poco de preocupación.

Zayn se froto sus brazos pero antes de que comenzara a relatar lo que tenía para decirme lo invitaría a pasar a mi casa ya que me di cuenta que tenía frío.

-Vamos adentro –Zayn asintió y entró- toma asiento –ofrecí.

Una vez ambos sentados en el sofá de mi casa Zayn comenzó a hablar.

-Verás... no me gusta hacer esto pero es necesario –su voz era temblorosa, estaba mal.

-¿De qué hablas? –pregunté confundida.

-Ya no te hablaré, ya no habrá noche de películas, ya no podré dirigirte la palabra, no habrá llamadas tuyas por la mañana para despertarme, yo tampoco te haré llamadas, no nos veremos a la salida del colegio para regresarnos juntos a casa, ya todo eso quedó atrás –su voz sonaba entrecortada y yo estaba en shock ¿Por qué lo haría? ¿Qué le había hecho yo?

-¿Por qué? –fue lo único que pude pronunciar.

-Mi relación ahora es más importante que cualquier otra cosa, es mi primer novia y tú más que nadie lo sabes, quiero que funcione, y ella no se siente cómoda así, le incomoda vernos tan juntos todo el tiempo y tengo que respetarla, créeme que no es por ti, es por ella por quién lo hago –me miró a los ojos esperando una respuesta.

-Bien –intenté sonar como si no me afectara en lo absoluto- si así lo quieres está bien, yo no puedo ni quiero intervenir entre ustedes dos, tu decisión está más que clara y yo la respetare, no hay problema por ello –Zayn asintió.

-Tengo que irme –contestó cortante.

-Adelante, nadie te tiene aquí a la fuerza –ambos nos levantamos del sofá y caminamos hacia la puerta de entrada.

-Adiós, tus llaves las deje bajo el tapete de entrada –me miro por última vez con sus ojos cristalizados, se dio media vuelta y se fue sin siquiera dejarme despedirme de él.

Tomé mis llaves, cerré la puerta tras de mí y me tumbe en el piso a llorar, ¿por qué la eligió a ella? ¿Por qué sobrepuso a Perrie ante mí? Yo siempre había estado para él, en todo momento, él me contaba todo y yo se lo contaba a él, no entiendo el por qué una chica de repente llega le gusta y puede decidir si me sigue hablando o no, y lo peor y lo que más me duele no es eso, sino que él decidió hacerle caso a ella, soy una tonta por haberme enamorado de él.

Después de unos 30 minutos subí a mi habitación, me tumbé en mi cama y me dediqué a dormir, no tenía que demostrarle que estuve llorando toda la noche por él.

Narra Zayn:

Me fui de su casa, era una noche helada, las calles permanecían con tal obscuridad que sería fácil para un ladrón esconderse en cualquier lugar y aparecer en cualquier momento.

Mi mente no dejaba de pensar en aquello que acababa de pasar, ¿Por qué creí que me diría que no lo hiciera? ¿Por qué creí que mediría que ella me quería quizás un poco más que un amigo? ¿Por qué sigo creyendo que tengo oportunidad de enamorarla? Todo está más que claro, ella está enamorada de Liam y yo tengo que enamorarme de Perrie.

Al llegar a mi casa subí con cuidado a mi habitación y al tumbarme en mi cama las lágrimas no tardaron en salir, a partir de mañana todo será diferente, ella probablemente está molesta conmigo, y pase el día con Liam, yo estaré con Perrie y así será hasta no sé cuándo.

Después de unos minutos quedé completamente dormido...

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Desperté gracias a los pequeños rayos del sol que traspasaban mi ventana, ya era tarde, creo que eso era más que obvio ya no tengo a nadie para despertarme temprano ni a quién pase por mí para ir juntos al colegio, no tengo a mi mejor amiga, bien hecho Zayn, eres el mayor estúpido de la historia.

Me duché y salí corriendo para alcanzar mi primer clase, y pensar que así será todos los días de ahora en adelante. Al llegar a mi clase un poco agitado por correr casi por veinte minutos estaba solo un asiento desocupado, al lado de Perrie, mi novia.

-Hola amor –me saludo e indico que me sentara a su lado.

-Hola –me limité a contestarle mientras tomaba asiento.

-¿Qué tal tu mañana? –pregunto depositando un beso en mis labios.

-Nada buena –contesté sin ánimos.

-Tú respuesta debería ser otra –dijo un poco desilusionada.

-¿A si? ¿Cuál? –pregunté confundido.

-Deberías decir "No tan bueno amor pero ahora que te veo es un buen día" –contestó fingiendo su voz por una más gruesa "como de hombre" la cuál era un fracaso.

-Oh... -la verdad era que verla simplemente no me ayudaba ni un poco.

El profesor entró por aquella puerta y ambos guardamos silencio ya que no queríamos tener algún reporte por estar hablando en clase.

Y así continúo toda la clase, hasta el timbre del almuerzo, guarde mis cosas en mi mochila y me levante de mi asiento.

-¿Vamos? –le pregunté a Perrie con algo de desespero.

-Ve adelantándote, yo iré a retocarme al baño –asentí y salí del aula.

Me dirigía a la cafetería y al entrar ahí se encontraba ella, se veía hermosa, como siempre pero con un semblante de tristeza en su rostro, y junto con ella estaba Liam, y a mi parecer su cercanía era más de la debida, en definitiva los celos me estaban matando.

-¿Te pasa algo? –preguntó esa voz tras de mi.