Photograph

574 41 10
                                    

Loving can hurt, loving can hurt sometimes
But it's the only thing that I know
When it gets hard, you know it can get hard sometimes
It is the only thing that makes us feel alive

No importaba cuantos años pasaron desde que Neal la dejó en la calle o mejor dicho en la cárcel, ese simple acto de cobardía de su parte –haya sido por el bien de ella o no- hizo que Emma aprendiera la lección más grande de la vida: Amar siempre trae dolor o en su defecto problemas. En su caso, trajo ambas obligándola a subir sus muros evitando entrar cualquier tipo de afecto o sentimiento.

Aunque claro esos muros ya estaban arriba mucho antes de lo pensado, pero no lo estaban en el plano sentimental, había aprendido a no tener esperanza desde los tres años cuando los Swan decidieron que no podían seguir teniéndola bajo su cuidado luego de tener a su propio bebe así que no encontraron nada mejor que devolverla al sistema aun cuando ella les llamaba mamá y papá.

Desde ese momento supo que siempre estaría sola ¿Para qué esperar por sus padres si ellos nunca vendrían?

Cuando salió de los 11 meses de retención tenía la sensación de que nada tenía sentido, nunca se había sentido tan sola en toda su vida, en ese momento necesitaba que alguien la contuviera, que le dijera que lo que hizo unos meses atrás con el pequeño bebe había sido lo correcto, necesitaba que alguien la escuchara, necesitaba que él la escuchara y contuviera, porque había sido su hijo al que había abandonado.

Sentía que el pecho le dolía demasiado, a veces le era hasta difícil respirar por la presión que sentía, las noches se le hacían interminables y los días agotadores pero estaba bien ¿No? Significaba que seguía viva ¿Cierto? Significa que seguía sola y que siempre lo estaría.

We keep this love in a photograph
We made these memories for ourselves
Where our eyes are never closing
Hearts are never broken
And time's forever frozen still

Cuando Milah murió Killian sintió que el mundo se le vino abajo, nuevamente. Había sido ella quien, con sus pequeñas aventuras e ideas vigorosas, le había ido curando las heridas que le quedaban de la partida de Liam tiempo atrás, con ella había hecho tantos recuerdos que si en su momento hubieran existido las máquinas de fotografía tendrían para llenar una pared entera con los innumerables viajes que habían hecho y las incontables batallas que habían peleado codo a codo.

Pero ella ya no estaba. Tampoco estaba su mano. El Oscuro se había encargado de no solo dejarle el dolor emocional de la partida del ser que amaba –que sin duda es uno de los más grandes que podría existir- sino que se encargó de dejarle también un dolor físico y el recuerdo de lo que le habían arrebatado de las manos.

A veces, cuando la tripulación estaba trabajando en el Jolly Roger y las aguas del mar estaban tranquilas se daba el lujo de entrar a su dormitorio solo para recostarse y cerrar los ojos, ya que al hacer el simple gesto podía ver su sonrisa, su alegría y algunas veces su picardía con la que lograba tener tragos gratis para la gente del barco.

Podía sentirla caminar cerca en la borda y gritar pequeñas ordenes al resto de los hombres, ordenes que él sabía que solo una mujer podría hacer y en verdad era la única persona que tenía esa pequeña autoridad, además de él, claro está.

Su corazón dolía y pedía venganza, no por él, sino por el recuerdo de su amada, porque sin ella estaba vacío, aunque tuviera la cabeza en los próximos movimientos que harían para entrar a saquear algún reino, simplemente actuaba por inercia. Algunas veces despertaba con el dolor en el pecho al saber que no la tenía en su camarote como tantas noches la había tenido, saber que no podría volver a tocarla o acariciar su cabello.

Photograph [Captainswan one-shot]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora