-¡EVE! ¡PHOEBE! ¡PHOEBE MCLEAN!
-¡Voooy!
Me levanto pesadamente y maldigo en voz alta cuando piso algo pegajoso. Bajo los ojos para encontarme con "regalitos" de perro. (Inserte voz sarcástica) empiezo bien la mañana. Abro la puerta agarrando un matamoscas como arma de defensa y choco con Simon uno de mis hermanos mayores. Tiene su pelo rubio teñido en las puntas de rosa chillón y la palabra Barbie escrita en la frente.
-¿Ross y Pete?-me pregunta.
-Ross y Pete.
-Menuda manera de celebrar el inicio de las vaciones.
-Ya.
-Ehh...¿Eve te has visto el pelo?- dice incómodo.
Rápidamente hecho a correr hasta llegar al primer espejo del pasillo y me miro. Yo los mato, mi precioso cabello negro está teñido de rubio. Me pregunto como diablos han conseguido hacerlo hasta que recuerdo que ayer antes de acostarme lavé el pelo, y estoy segura de que cambiaron los botes. Idiotas.
Bueno para que os aclareis haré una lista de mis hermanos:
-John: es el mayor, tiene veinte años y es el menos bromista de todos. Suele encerrase en su habitación y pasar de nosotros, los pequeños nunca le gastan bromas porque le respetan.
-Nate: tiene dieciocho años, y es el gemelo Simon. Tiene el pelo rubio y los ojos azules. Le encantan los caballos.
-Simon: es el gemelo de Nate. Son completamente idénticos pero el es más presumido por lo que le solemos llamar Barbie.
-Alex: tiene quince años y es el rey de las bromas. Su pelo es del mismo tono que el mío y tiene los ojos mieles. Los pequeños lo idolatran y sueñan ser como él. Es mi mellizo.
-Pete: tiene once años. Es un bromista de pelo rubio y ojos mieles. Adora pintar y sabe hablar siete idiomas.
-Ross: tiene nueve años. Su pelo consiste en una maraña de rizos pelirojos, y sus ojos son grises. Es el compañero de bromas de Pete y de Alex.
-Will: tiene seis años, pelo castaño ojos grises y millones de pecas. También es un bromista, pero comparte mi gusto por los libros.
-Derek: es el más pequeño de tan solo cuatro años. Pelo negro y ojos verdes. Es un genio infantil.
Y eses son mis hermanos.
Nada más entrar en la cocina una cucharada de algo me da en toda la cara. La cocina es un estropicio. Mi padre aún está en el pueblo más cercano comprando y ha dejado a John al mando. Observo que Nate, Simon y yo hemos sido los objetos de las bromas de inicio de verano. El tema de este año ha sido "tinte" es bastante obvio.
-Hola rubia teñida- me dicen Ross y Alex a la vez.
-Hola idiotas.
-¿Por qué no vas a darle de comer a Nym?
Oh no, a mi dulce golden retriever no le han hecho nada. Salgo corriendo de casa y me la encuentro tumbada en las escaleras. Esta teñida, como un tigre.
-¿Phoebe? ¿Phoebe Mclean?- reconozco esa voz al instante, pertenece a la persona que más odio en este mundo. Fantástico.
