School Days - Mericcup/Hiccelsa

Capítulo 1.

Si nadie lo descubre alcanzarás su amor ¿Eh?

[Pues entonces lo intentaré] Pensé mientras ponía la foto de la pelirroja del tren que le había sacado, de fondo de pantalla. Si, así de sicopata soy. Pero dicen que si pones una foto de fondo de pantalla de tu amor durante 3 semanas (sin que nadie lo descubra) alcanzarás su amor.

-¡Oye! ¿Que ves? -Dijo Elsa, la chica que se sentaba a mi lado y me hizo sobresaltar -¿Es ese hechizo del que habla todo el mundo? -Dijo mientras miraba la foto de la pelirroja que dejé de fondo de pantalla -Que tonto eres Hiccup, esas cosas no funcionan -Apagué mi celular.

-¡No es eso! -Le regañé -Ademas no debería importarte Elsa -A esta chica siempre le he tenido mala.

Se revolvió incómoda y puso atención al profesor.

-A partir de hoy nos sentaremos juntos. Encantada, Hiccup

-Vale, vale -rodé los ojos.

-Oye Hiccup, ¿Eres bueno con los estudios?

-Para nada.

-Oye, Hiccup

-¡¿Que quieres?!

-Te gusta Mérida de la clase 4 ¿No? -MIERDA, MÉRIDA ES LA PELIRROJA.

(...)

-Oye, Elsa -Le di un codazo y traté de hablar bajo porque el profesor esta haciendo clases.

-Estamos a mitad de clases Hiccup, no me molestes

-Solo, no se lo digas a nadie.

-¿Por que no?

-¡Porque yo lo digo!

De pronto Rapunzel, la amiga de Elsa nos mira mal.

(...)

-¿Por que tienes las llaves del tejado, Elsa? -Pregunté mientras entrabamos a este.

-Soy la presidenta del club de astronomía, les dije que queria una llave del tejado para ver las estrellas

-En fin, ¿De que me querías hablar?

-Ah, verdad... -Dijo y sacó su celular -¡Tada! -Era una foto de ella con Mérida -Me acabo de hacer amiga con Mérida.

-¡¿Que?!, ¡¿Como lo hiciste?!

-Parece que te interesa mucho esta chica

-Para nada -Disimulé

-La conocí en clases de educación física. Tiene un cuerpo muy débil, por eso estaba sentada, yo me senté a su lado con una enfermedad falsa como escusa.

-Fingir una enfermedad falsa no esta bien...

-Lo hice por ti, Hiccup, se nota que te gusta... En fin, ¡Hablé un buen rato con ella y conocí varias cosas de ella!

-¿D-De verdad?

-Mérida es muy guapa, por eso no encaja en su clase.

-¿Enserio?

-Estaba sentada sola, porque no logró hacerse amiga de nadie... ¡Yo he conseguido su e-mail y su móvil!

-¡Increíble! -Dije -Pero... ¿Porque te interesa tanto ayudarme?

-No lo sé, me gusta ver a la gente como se enamora -Dijo y sonrió.

-Gracias -Dije y le devolví la sonrisa.

-Bueno, ¡arriba el ánimo! ¡Le he pedido que almuerze con nosotros y a aceptado!

-¡¿QUE TU HAZ HECHO QUE?!

-Bueno, puedes agradecerme si quiera.

-Lo siento, yo no almorzaré con ustedes, no puedo, ¡Que verguenza! -Dije y me agarré a la manilla de la puerta.

-¡De eso nada! ¡Tú almuerzas con nosotras! -Gritó y me llevó a una banca que estaba en el tejado.

Tocó el timbre.

-¡DEJAME IR! -Dije y empezamos a hacer una batalla de pelea para que no me escapara.

Y entró Mérida.

Enseguida nos arreglamos y nos sentamos bien, le regalamos una sonrisa y la invitamos a que sentara en nuestra banca.

-Bueno, Mérida, el es Hiccup, Hiccup ella es Mérida -Nos presentó Elsa.

-Un gusto -Dijo ella con una sonrisa tierna mientras estrechabamos manos. Yo me quedé callado pero le devolví la sonrisa.

-He traído unos sandwich's que he hecho yo misma -Dijo Mérida mientras abría un pequeño canasto que traía.

-¡Mujer! ¡Gracias! -Dijo Elsa y ambos sacamos un sandwich para luego morderlos.

Esto sabe mal, de hecho me dieron ganas de vomitar, creo que a ambos.

-¿Como están? -Preguntó curiosa la pelirroja.

-¿Eres nueva en esto verdad? -Pregunté con ironía.

-¿Por qué? ¿Estan malos? -Dijo asustada.

-¡¿Que?! ¡Claro que no! -Dije y empezé a comer rápidamente los otros sandwich's que quedaban en el canasto.

Iu.

-Bueno, los dejo, tengo que ir a supervisar el club de astronomía -Dijo y me guiñó un ojo a modo de mentira.

Y se fué.

Momento incómodo.

-Los sandwich's estaban buenos -Dije para romper el hielo.

-¿Enserio? -Sonrió -Me agrada que te hayan gustado, la verdad acertaste, soy nueva en esto -Se notaba.

-Bueno, un gusto conocerte Hiccup, debo irme a mis clases, ojalá vernos otra vez -Dijo y volvió a poner su sonrisa tierna.

-Si, claro que sí -Dije y se fué.