El Roble

Como Fue Mi Vida

Hubo una vez, hace un tiempo no muy lejano, en un lugar no muy distante, se encontraba un enorme y hermoso bosque de robles, entre tantos robles había nacido yo, nací y crecí al lado de una carretera, en este bosque habían muchas personas que nos regaban, cuidaban y preocupaban por nosotros, empecé siendo una pequeña plantita como todos los robles a mi alrededor y gracias a ellos todos crecimos hasta convertirnos en hermosos robles...........

Aquel boque era una reserva donde llegaban muchas familias y personas a pasar el día, a mis pies había una mesa y unas bancas para que ellos se sentaran para comer y disfrutar el momento, eso me hacía muy feliz pues podía ver como todos gozaban bajo mi sombra; Ya en las Tardes las personas dejaban de llegar , pero las ardillas y aves (y ese tipo de animales) ya estaban listos para acomodarse entre mis ramas y utilizarme para pasar la noche resguardándose de cualquier peligro o algún cambio tosco de clima.

Ningún día era igual a otro, pues siempre observaba a mucha gente diferente en muchos aspectos, tantos físicos como en su actitud, además, ya que había nacido al lado de una carretera siempre podía ver los carros transitar, la mayoría de conductores bajaban la velocidad al pasar por aquel lugar y se quedaban contemplando la grandeza y belleza de nosotros los robles, lo que por cierto me gustaba mucho.

Un día de tantos las cosas empezaron a cambiar, la gente dejo de llegar, los vehículos dejaron de recorrer aquella carretera y las personas que tanto habían cuidado de nosotros... A ellos no los volví a ver jamás...

Después de que todo se volvió tan solitario, una noche pude notar a muchos hombres llegar cerca de mi área, tenían un aura oscura y maliciosa, lo cual me dio un mal presentimiento, y estaba en lo correcto, resulto que ellos habían comprado la reserva con fines de talar los árboles para fabricación de muebles y objetos que se elaboraran a base de madera; Poco a poco el bosque empezó a desaparecer, note como todos mis compañeros eran talados y observe como en un corto periodo de tiempo ya me iba quedando solo...

Una noche empezó a llover, y yo ya era el único árbol que quedaba en el sector, por lo tanto me tocó enfrentar solo aquella tormenta nocturna, ya no había ningún animal resguardándose en mí, pues desde que los arboles comenzaron a ser cortados, ellos dejaron de venir acá.

Esa noche de tempestad pude sentir como el viento sacudía bruscamente mis ramas y como el suelo en el que yo estaba plantado empezaba a humedecerse hasta crearse grandes charcos de lodo, a mí me gustaban esas noches de lluvia cuando estaba con los otros árboles, pero esa noche fue diferente, el estar sin compañía me entristeció mucho haciéndome pensar: "para que nací si iba a tener que sufrir esto...? "

La tormenta paso y a la mañana siguiente llegaron dos hombres con sus hachas y sus cascos, caminaron lentamente hacia mi mientras se colocaron sus gafas protectoras y dijeron: -"Bien, Este es el ultimó"

-"De él saldrá muy buena madera"

y después de eso solo sentí unos cuantos dolorosos golpes en mi tronco, sentí que no me podía seguir manteniendo de pie y causando un enorme estruendo caí, con el ultimo pensamiento que tuve:" Espero que mi madera y la de mis compañeros vaya a ser lo suficientemente valiosa que a como lo fueron nuestras vidas" y después de eso no volví a sentir nada más...

FIN.