1.-"El asunto"

223 15 2
                                    

Mientras el cielo alumbraba las calles de Doncaster dando una imagen de todo su resplendor, y los rayos de sol parecidos a chorros de oro penetraban la ventana de mi habitación sigilosamente, yo me levantaba de mi cama hecha de toda pereza. Hoy nos íbamos al apartamento que tenemos a Londres, una de las propiedades de mi padre, empezando así una etapa de vacaciones. En teoría tendrían que ser tiempos felices, sin embargo no lo eran.

-¡Mamá! ¡Levanta tu maldito culo de la cama y haz tu jodida maleta! Nos vamos.-

Escuché quejas y gimoteos como siempre, pero también como siempre, hice caso omiso. Como chica responsable me levanté dos horas antes para que a mi madre le diera tiempo de preparar sus pertenecias en una bolsa y poder llegar a tiempo al tren. Ella siempre tenía que dormir más tiempo, "mi piel necesita horas de sueño para mantenerse firme y bonita", siempre decía. Es increíble lo inmadura que es. Todavía no se que le vió mi padre, pues su carácter es horrendo, y siempre tiene que ser ella la mejor en todos los campos disponibles. Puede que de aspecto esté bien, pues viste con más maquillaje que ropa, y miente más que habla. Así que siempre conseguía dar una buena impresión muy positiva.

***

Una vez guardadas en la casa nuestras pertenencias, lo primero que mi madre hizo fué ir a dar una vuelta por las bonitas calles de ahí para encontrar Británicos guapos. En cambio yo tuve que quedarme para hacer la comida, ya saben, cambio de papeles. Me apetecía caminar por Londres probablemente más que lo que le apetecía a mi madre, sin embargo aquí me tiene.

El tiempo pasó lentísimo, parecía que estaba mirando una película mala, pero al fin llegó mi madre.

-Fea, ¿Qué has hecho para comer?-Dijo con tono alegre-

Parecía que lo había pasado bien. Además disfrutaba manchándome de esa manera. Solo esperaba a tener los 18 y poder escapar legalmente de ella. De lo contrario se liaría bastante parda, así que ahí me tienen esperando.

-Macarrones.-

-¿De esos tan sosos que haces tu? Puagh, yo no como de eso.-

-Pues no hay otra cosa.-

Ella sonrió y deduje que una idea se le pasó por la mente.

-Ahora no, pero puede que dentro de media hora, cuando me hayas preparado la comida que quiero si. Hala, hazme arroz a la cubana, y filete de pollo de segundo plato.-

Di un largo suspiro. Lo que una tiene que aguantar.

-Esta bien.-

Cuando al fin pudimos comer, como siempre me atacó con sus comentarios tipo: "A la costa de mi plato el arroz está frío", "¿No podías dejar el pollo más tiempo en la sartén? ¡Un poco más y aún está vivo! Parece que de un momento al otro saltará de mi plato y escapará". "¿No has hecho nada de postres?" Por dios, lo que una tiene que aguantar..." "Solo sirves para molestarme, niñata. Encima que te cuido y te hago de madre para que no estés sola,me haces esta comida tan horrible". Pero bueno, eso son cosas de las que ya me he acostumbrado. Todo era como siempre, pero en una mesa de un apartamento de Londres. Nada cambiaba, solo el paisaje. Pero de repente un comentario inesperado se escapó de los labios de esa mujer.

-Va a venir un hombre rico muy guapo, escóndete en tu habitación. No debe saber que te tengo como hija. Ah, y antes friega los platos, no puedo darle esa imagen de chica cochina.-

Bueno, tampoco era del todo inesperado, casi cada semana venía un chico, y todos eran siempre diferentes. El chico perfecto para mi madre era "¡Joven, sexy, y rico!" siempre me lo recordaba, como si no lo supiera ya. El tiempo pasó, yo fregué los platos y cuando faltaban cinco minutos para su cita recordó que no había comprado vino, así que me lo pidió a mi. Era perfectamente consciente de que no podía comprar alcohol al ser menor, pero no quería estar ahí cuando mi madre y ese hombre hacían ruidos extraños. Era la primera vez que paseaba sola por Londres, y algunos me miraban en exceso, pues vestía aun con una camiseta larga a tiras y unos pantalones de deporte anchos que me había puesto encima para que no se me vieran los shorts. Mi madre no me dejaba ir "exibiéndome por las calles". Aun que ella iba casi sin shorts por ahí. No es por nada, pero ponéos en mi piel. Todo lo que tengo en esta vida es a mi madre, que me odia y la odio con exceso. No puedo salir por las calles, no puedo tener amigas, no puedo tener novios, no puedo nada. Soy una completa ignorante, 17 años y no he tenido ni un novio, ni un desliz, ni he salido de fiestas, ni he estudiado... se lo básico, la escuela. Ya me dirás tu como acabaré en esta vida...

Irresistible. [Harry Styles]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora