Los secretos

Capítulo 1

Me llamo Tinisara, tengo 23 años, rubia con ojos verdes, profesora de música en un colegio de Nueva York, no tengo pareja y tampoco la busco, bueno... eso creo, me gusta un chico llamado Bruno, pero es el típico chico malo, él es mi vecino y es escritor. Me encanta sus ojos grises y su pelo castaño...
Mi mejor amiga se llama Aria, somos amigas desde pequeñas, ella es pediatra, le encantan los niños.

Vivo en un pequeño piso en Nueva York, sola. El piso no es gran cosa solo tiene un baño, tres habitaciones, una cocina y el salón.

Mi vida, no es la de una super estrella, o la vida que toda mujer desearía tener con su marido y sus hijos, mi vida es muy simple solo trabajo y de vez en cuando salgo con mi amiga Aria.

Desde que era pequeña todos los que me rodeaban me trataban como un bicho raro y me decían que yo no era como ellos... decían que eran especiales, pero mis padres me decían que no les hiciera caso. Mis padres nunca estaban en casa por las noches siempre salían y no volvían hasta muy tarde. En casa de Aria pasa lo mismo, un día me quede a dormir en su casa y cuando me di cuenta ni Aria ni sus padres estaban. Todos me dicen siempre la misma excusa pero ya no me la creo, espero averiguar algún día que es lo que pasa...

Una mañana fría de otoño salgo de mi casa, de camino al trabajo, me topo con Bruno que viene de correr, me mira fijamente a los ojos y no me dice nada solo me inspecciona con la vista y sigue su camino. Nose que tiene este chico que me vuelve loca, me sonrojo y continuo mi camino. Empiezo a tararear mi cancion favorita de Maroon 5, el aire frío me choca en la cara y apaga mis mejillas encendidas. Me encanta pisar las hojas mientras voy caminando sintiendo el aire frío en mi cara y ver como las hojas que quedan en los árboles poco a poco se van callendo.

Al llegar al colegio dejo todas mis cosas en la sala de profesores, saludo a mis compañeros y me voy corriendo a mi primera clase.
-Buenos días- saludo mientras coloco los instrumentos que vamos a utilizar en el suelo.
-Buenos días profe- responden todos casa al unísono.
El día transcurre con tranquilidad. A última ahora tenemos que llevar a los niños a un charla, hoy es el día del libro y van a venir al colegio un chico que les va a dar consejo para elegir buenos libros y cosas así...
Llevo a mi clase al salón de actos donde están los demás cursos y mis compañeros de trabajo.
-Tinisara ven siéntate aquí- me dice mi compañera Yurena señalando un sitio libre a su lado.
-hola yurena, gracias por el asiento le muestro una de mis mejores sonrisas. Yurena es profesora de lengua, es la mejor del colegio, pero es muy estricta.
- ¿Quien va a venís a dar la charla de los libros?-
-Es un chico joven, es escritor- mi cara es un poema ahora mismo, como sea Bruno yo me muero.
-ah- respondo con un hilo de voz.

De repente todos los alumnos se quedan en silencio y presto mi atención al escenario, mierda es Bruno. Esta increíblemente guapo lleva unos vaqueros caídos y una camisa de manga larga negra que se ciñe a su cuerpo, marcando sus musculosos brazos, sus ojos grises brillan ante los focos y su pelo desenfadado, es perfecto.

Empieza la charla.
-hola a todos, soy Bruno Martinez y hoy os voy a hablar sobre los tipos de libros, que a vuestra edad son mejores- dice mientras se da la vuelta para encender su ordenador y mostrarnos unas diapositivas.
Durante la charla pensaba como es posible que este tío estuviese aquí, osea me refiero a que no entiendo como el colegio permite que venga a dar una charla sobre libros un tío con unos visibles tatuajes en el cuello y pircens por toda la cara a unos niños de 15 años que están en la época de seguir la moda de todo el mundo...
-A que es guapo- me susurra Yurena.
-ehh si es... bastante guapo - digo con las mejillas rojas.
- lo elegí yo con la directora, él no quería al principio, pero la directora le ofreció más dinero y enseguida acepto- dice con una sonrisa en la cara.
- ¿no habían más?
- Sí pero los demás eran más caros, lo único que le pedimos fue que se tapará los tatuajes de los brazos, seria mala influencia para los niños-
-claro...-
Al terminar la charla, mis alumnos salen del salón de aptos y vamos todos a la clase, yo soy la más rápida porque no me quiero topar con él.
Termina el día recojo mis cosas y me voy a casa.
Por el camino pienso llamar a Aria para contarle lo que a pasado hoy, no se lo va a creer.