sentimientos cruzados

10 ¿DUDAS?

El beso estuvo bien pero lo que realmente nos separo fue un carro que paso a toda velocidad por un charco der y termino de mojarnos ,no me puse los zapatos hasta algunas calles antes de llegar al restaurante, la mujer en la entrada verificando reservaciones, casi no nos deja entrar, si no hubiera sido por ashton, que la persuadió con sus encantos, llegue a sentir un poco de celos, pero no como los que siente una novia por su novio, más bien los celos que siente una hermana por su hermano y yo ya los había sentido antes, el beso con noha me había confundido.

-pequeño saltamontes, donde estabas, estaba muy preocupado-dijo ashton abrazándome muy fuerte, me dolieron las costillas u poco y lo aparte sutilmente de mi

-querida loca, lo siento, pero está muy tarde y tendré que irme a mi casa o mama me matara-dijo cata mirando la hora en su celular

-vamos, yo te acompaño amor-cata y Max salieron  después de una corta despedida y un "mañana me lo explicas todo" departe de cata, ashton se ofreció a llevarme en su auto y noha cogió el auto bus , aunque le insistí que viniera con nosotros no accedió así que me limite a encoger los hombros y despedirme de el con un beso en la mejilla, de camino a casa, el teléfono de ashton sonó  pero no preste atención a lo que decía.

-pequeña saltamontes, si no te molesta, tengo que ir a recoger a  mi hermana de una fiesta, al parecer el conductor elegido era ella y se emborracho

-sí, tranquilo no hay lio- avanzábamos cada vez más y las calles se iban volviendo peores, por un momento me asuste pues ashton se veía muy serio y nervioso, cada vez apretaba más el volante, pero me limite a mirar como las gotas de lluvia se deslizaban sobre el cristal. Cuando llegamos habían 2 chicas  una sosteniendo a la otra, ashton se bajó rápido y cogió a la chica que parecía peor, supuse que era su hermana, apenas abrió la puerta y vi su cara, fue como si el mundo se detuviera, era la misma chica del entierro  de la escuela y de la fiesta, ella hiso lo mismo cuando me vio y fue como si de repente todo lo que se hubiera tomado ya no surtiera efecto en ella, se puso pálida y abrió los ojos como platos, le susurro algo en el oído a ashton y el los abrió igual que ella, hay encontré el parecido entre los dos, la nariz era muy parecida y los ojos de ella brillaban como los de él y aunque su tono no fuera igual se les notaba, cualquiera lo habría  descubierto.

La chica se acomodó detrás de mí fuera de mi vista, la otra chica era muy blanca con el cabello negro y despelucado y los ojos tan oscuros que parecían negros

-hola soy melisa-dijo extendiéndome la mano, le correspondí por el simpe hecho de voltearme con una excusa para mirar a la extraña y asegurarme de que fuera la misma del instituto.

-mucho gusto je...

-jenn linston verdad? Ashton habla mucho de ti-me interrumpió la extraña-mucho gusto lorraine-dijo extendiéndome la mano, pero esta vez no le correspondí pues ashton estaba cerrando la puerta trasera y montándose en el auto para manejar hacia mi casa, el resto del camino fue tenso, nadie hablaba y ashton tenía la mirada dura, faltaban pocas calles para llegar a mi casa y por segunda vez en la noche, el teléfono de ashton sonó, esta vez sí preste atención a lo que decía:

-si ya vamos para allá..... No no.... Este listo-y colgó

-quien era-dije dulcemente- él no me miro y pareció no escuchare, unos instantes después me miro a los ojos y sentí frialdad en su mirada

-mi padre preocupado por lorraine- no recordaba una sola vez, que ashton me hubiera hablado de su padre o su madre. Llegamos y ashton se aparcó en frente de mi casa, ya estaba oscuro pero aun no pasaba el toque de queda

-bueno jenn nos vemos mañana-dijo sin ningún tipo de expresión en su voz, habiendo llegado ya a la puerta, intente darle un beso en la mejilla pero se apartó me quede sorprendida, él se lo pensó u n segundo, y me cogió suavemente de la cara y me dio un dulce beso, mientras se alejaba no dije nada, tan solo lo despedí con la mano y abrí la puerta , cuando entre, todo estaba apagado, en la oscuridad alcancé a distinguir una sombra sentada en el sofá grande