Mi vida como suicida

mis amigas las cuchillas

Me llamo Olivia Morrinson, tengo 15 años y soy huérfana,pero después hablare de eso.. la única compañía que tengo es de la de mi madre,soy adoptada claramente, llevo adelante mis problemas alimenticios,me da asco la comida,pero en si peso 37 kilos,me veo gorda,soy gorda,me dicen gorda, mis únicas amigas son las pastillas,mis compañeras las cuchillas.
En semanas empiezo en un nuevo colegio,la cual no es una buena noticia,no me gusta la convivencia, odio a las personas,son totalmente repugnantes. Amigas? Aparte de las pastillas,no tengo.

Bueno..ya un 19 de marzo ingrese, mangas largas,pantalones largos.. no se notaba. La asquerosa preceptora me presento a la cual dijo mal mi apellido,mis ganas de matarla aumentaban. Me senté sola y sin mirar a nadie abrí mi mochila.. la cual segundos después una repugnante voz chillida me pregunta mi nombre a la cual ignore por su puesto.
Hablaron mal de mi, y yo las escuchaba,me miraron de arriba para abajo, ya me sentía incomoda,no aguantaba mas, me pare, le pedí a la profesora para ir al baño, entre, trabe la puerta y levante mis puños.. y sin pensarlo lo hice,me auto lastimé, ya se me hacia algo normal, las pastillas me ayudaban a reponerme, las necesito como el aire para respirar,con un suspiro profundo, volví a mi banco, no dejaba de mirar al reloj para poder salir, minutos después toca el timbre.. si,el recreo, convivencia,personas, amigos,que asco.

Se me acerca un chico, pelo oscuro, ojos verdes, me dice su nombre, me pregunta el mio, seguí de largo sin responderle, trepe una pared, salí de la escuela empecé a correr por una calle vacía como mi estomago, el me persigue, trepa ,me corre, yo asustada corro mas rápido, me tropiezo con una roca, el me levanto del brazo,me miro a los ojos, me subió las mangas y me abrazo,trate de soltarme a los gritos y empecé a llorar, el me rodeo con sus brazos pidiéndome que me calme, era rara la situación, parecía como si el me conociera de toda la vida, me pregunto - ¿Eres suicida? a la cual le respondí - ¡sueltame! , el me repitió la pregunta elevando el tono de voz, le dije que no,yo no paraba de llorar, ¿por que mientes?- me pregunto- , ¿porque finges importancia? -le pregunté también- .De lejos se escucho el timbre ,pude escapar de el, corrí, trepe el muro y regrese al colegio, no se que fue de el después de ese día.