Acostarme sobre mi cama y soñar las cosas que deseo que me pase. Ver el cielo y pensar en la estrella más lejana y antigüa del universo. Cerrar los ojos y pedirle un deseo a esa antigüa estrella. Para luego darte cuenta que fue en vano.... O tal vez no.
Que tengas un buen día y una sensual noche.