Lunes, un día pésimo, obviamente para mi. Mi vida no es fácil. Pronto sabrán como es.
Me mire al espejo, mi cara, mi cuerpo, mi cabello, era un asco.
Me hice un peinado rápido, me puse la típica ropa. No necesito nada mas.
Nada de maquillaje, nada
Escuche la puerta, me gire a ver, era mi mamá.
-Ya hay que irnos Jessica.- dijo mirándome de pies a cabeza.
-Si lo se, deja arreglarme bien y bajo.- dije mirándome al espejo.
-apúrate.- dijo.
-Mamá, tengo que arreglarme.- le conteste de mala gana.
-¡Pero ya estas bien Jessica!.-dijo gritándome.
-¡Tú no sabes lo que es estar bien!.- le grite, de la misma forma.
-te comportas como una niña. Sabes que, cancelare el viaje.- dijo enojada.
-¡No mamá! Ese viaje es mi vida, no lo puedes hacer.
-lo haré, y no importa lo que digas.- Cerro la puerta, en mi cara.
(.....)
Llegue al colegio, no sabia que hacer, iba a cancelar ese viaje. Y ese viaje era como mi vida. No puedo hacer. Mi mamá cuando dice algo lo cumple.
Fui a mi casillero, y cogí los libros, cuando voy a cerrar alguien me coge la mano. Era Gabriela.
Gire ella estaba con su hermosa sonrisa. Pero me notaba algo triste.
-¿que te pasa?.- me dijo.
Me conocía perfectamente, siempre ella sabía todo.
-me matare, te lo juro, ya no aguanto mas.- fue lo único que dije.
-¿que paso?.- dijo algo alterada.
-una pelea con mi mamá.- le dije.
-oh vamos jessica solo fue una pequeña pelea .- me dijo tocándome el cabello.
-si pero esto siempre sucede..- le dije obvia.- nadie me entiende Gabriela, solo tú.- mire al suelo. Me senté en una banca.
-Mira, es que nadie sabe la hermosa persona que eres, y no se han dado cuenta que eres increíble.- me dijo sonriendo.
Ella siempre decía cosas que me animaban.
La mire y le sonreí.
-gracias, en serio gracias.- la abrace.
Necesitaba un abrazo, nada mas. Ella era única, era increíble, era mi mejor amiga.
(....)
-míralo, es lindo.- me enseño la pantalla de su celular.
-¿quién es?.- dije curiosa.
-¿te gusta?. Mira jessica te acepto a cualquiera, pero a él nunca.- dijo.
-ni siquiera se quien es.- dije obvia.
-oh vamos, bien que sabes!.- me tiro la almohada.
-te lo juro Gabriela, no se quien es.- dije seria.
Me notó seria, así que sabía perfectamente que era verdad lo que decía.
-Es Austin, Austin Parker.- dijo.
