→2←

30 3 1
                                    

Y han pasado cinco años y ambos siguen sin hacer las paces.
Que inmaduros. Viven al lado pero se ignoran. Yo vivo en medio pero, es su historia, no la mía.
El final de su relación se debió a que el chico, Alberto, se supone, porque yo sé que no fue así le engañó y la chica, Sonia, se enteró mal y bueno... ya sabéis el resto.
Y yo tengo que soportar ser amigo de ambos pero, no poder quedar con ellos a la vez, que mala suerte la mía.
Dejémos de hablar de mí.
Sonia ahora tiene un novio (que me cae fatal) llamado Daniel pero, no se pronuncia así, tal cual sino a lo inglés Daaniel.
Es bastante fastidioso querer a dos personas tanto y que, por un malentendido se odien.
Sé que ambos están arrepentidos pero que, el orgullo no les permite perdonarse. Malditos seres humanos que somos.
Y aquí estoy yo, con Alberto viendo una película de terror en el sofá y comiéndo palomitad mientrad me cuenta que su madre está enferma y que dentro de poco se irá. Cosas que pasan.
Pero como dice un buen escritor [Albert Espinosa] "Lo triste no es morir sino, no vivir intensamente".
La película ha terminado y Alberto está llorando.
Ya se le pasará.

RencorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora