La creación
En el inicio estaba Lore, creador de todo, nació solo, en el vacío del infinito sin ninguna otra distracción más que pensar, pensó en su nacimiento, en su vida, en el por qué de su existencia hasta que se cansó y comenzó a observar lo que le rodeaba, nada claro, lo único que había era un vació infinito y oscuro y decidió que no le gustaba, había que hacer un cambio, había que crear algo.
¿Qué es lo que necesito primero?- pensó- Ah claro, luz
Y luz apareció, todo alrededor se iluminó pero no era suficiente, ahora todo le parecía más solitario.
¿Qué me falta?- pensó- Alguien como yo.
Y al igual que antes, apareció, no era una copia, no, era un ser completamente nuevo, con sus propios pensamientos y deseos, Lore lo miró a los ojos y dijo.
Tú vienes de mí y te doy la bienvenida soy Lore
Vengo de ti y te agradezco- respondió el ser nuevo- ¿Quién soy?
Tú eres Kros, mi mano derecha y amigo- respondió Lore contemplando el rostro iluminado de Kros al ser bautizado- Ahora, ¿Qué crees que falta aquí?
Color, tal vez o algo más para llenar el espacio vacío-dijo Kros
Tengo una idea.
Lore pensó un largo tiempo, formas, tamaños, colores y todo lo aplicó a nueve pequeñas esferas que se materializaron en la punta de sus dedos y con una sonrisa se los mostró a su compañero.
Son hermosos-dijo Kros
Lo son, y girarán en torno al centro-dijo apuntando a la luz- acelerando su paso mientras más cerca estén dejando un tiempo claro y otro oscuro.
Entonces lanzó las nueve esferas que inmediatamente comenzaron su trayecto infinito. Observando su creación Lore continuó pensando qué más agregar, no estaba conforme con mirar como sus creaciones giraban eternamente, necesitaba algo que cambiara, evolucionara, algo con que jugar a su manera y que pudiera controlar a su antojo. Entonces una idea llegó a su cabeza. ¿Y si hacia seres iguales a él y a Kros pero sin el mismo poder, seres que pudieran extinguirse y comenzar nuevamente?. Le explicó la idea a su compañero y este acepto con mucho ánimo.
Pero, ¿Cuál de todos usaremos?- preguntó Kros señalando a las esferas
Todos, cada uno tendrá seres diferentes, agresivos, pacíficos, poderosos, débiles, nosotros escogeremos- respondió Lore- por ejemplo, a este que está más cercano a las luz, los pasos de lo claro a lo oscuro son los más rápidos asi que los seres tienen que poder adaptarse a eso.
Y asi, lo intentaron una y otra vez con todas las esferas, creaban un habitante para cada una y observaban que ocurría con él, les daban distintas formas y tamaños hasta que daban con la correcta, después diseñaban el ambiente, el modo de sobrevivir y los peligros que el ser tenia, lo veían superarlos o fracasar y obtenían nuevas ideas. Hasta que en la tercer esfera uno sobrevivió, era ya el decimo intento, se habían dado cuenta que seres parecidos a ellos pero sin sus dotes no podrían soportar un ambiente como ese asi que empezaron a crearlos más grandes y fuertes, con grandes dientes, patas y cola para una mejor movilidad, escamas para protección y garras para luchar, era imperfecto, justo lo que ellos querían, solo le faltaba algo, sus patas eran muy lento y pequeño para recorrer todo su mundo, asi que decidieron crearle una alas, negras e imponentes, para poder surcar los cielos. Pero al igual que al inicio, el ser también estaba solo asi que Lore y Kros decidieron concentarse en esa esfera, se presentaron ante su creación pequeños pero imponentes.
Vienes de nosotros y te damos la bienvenida, somos Kros y Lore
El ser los miró por un largo tiempo, como si no estuviera seguro de lo que estaba pasando ante sus ojos.
¿Quién soy?- fue su única respuesta
Eres Valkan, el primero de los tuyos y este es tu mundo-dijo Kros abriendo los brazos- lo iremos expandiendo y diversificando para asi tener una gran variedad de seres en él.
¿Qué soy?
Eres un dragón, la primera creatura pensante de este mundo y por lo tanto el único- dijo Lore
¿Estoy solo?
Sí, pero no por mucho tiempo- dijo Lore apuntando a su espalda- esta es Axa, tu pareja.
Vienes de nosotros y te damos la bienvenida Axa, somos Lore y Kros.
Muchas gracias-dijo la recién creada.
Ya con los primeros seres sobre esa tierra Lore y Kros continuaron con la tarea de poblar aquel mundo, se encargaron de darle vida y color, grandes mares y diversas tierras, más seres le siguieron a los dragones, los gigantes reyes de los mares por ejemplo o los señores de los bosques, todos ellos convivían en armonía, cada uno dentro de los límites de su tierra, los seres más pequeños cambiaban constantemente, las razas comenzaron a mezclarse por sí solas dando paso a nuevas formas de vida. Poco a poco el mundo crecía.
Dragones.