Capítulo 5: Noche de Chicas

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Parte 2

*NARRA __________*

Mi amiga y yo nos fuimos hasta el comedor y nos sentamos en nuestras respectivas mesas. Hice la ofrenda y llegó mi hermano para también hacer la suya.

-Hermano querido mio- le dije con un pedazo de mi comida, masticando.

-Awww, te pareces a mí- dijo con una mano en el corazón y cara tierna.

-Déjate de eso- dije al terminar mi bocado. -Ahora si te puedo decir lo que estaba tratando de decirte en el lago-

-Sueltalo tormento.

-Bueno, mi amigas y yo estábamos organizando una noche de chicas y como las dos tienen muchos hermanos en sus cabañas pensamos que la podríamos hacer en la nuestra y...

-Osea que me quieres correr de la cabaña por la noche de hoy?- dijo interrumpiendo.

-Noo! A eso es a lo que iba, mis amigas piensan que sería bueno que estuvieras en la cabaña como si fueras una chica más- le dije sonriendo.

-En serio? Oohh que divertido!! Ten por seguro que si estaré y haremos eso de retos como cuando Jason hizo una noche de machos pechos peludos que se respetan en su cabaña después de la guerra contra Gaia, será muy divertido- dijo con la voz chillona.

Cuando terminamos de comer nos fuimos de nuevo con las actividades pero yo en vez de hacer mis actividades me fui a buscar a Nico. Lo busqué primero en la arena y no estaba en ella, también fui a su cabaña y tampoco, así que me fui al bosque para ver si lo encontraba. Tuve suerte de que estaba saliendo de el y corrí a abrazarlo.

-wow...- dijo sorprendido. -a que se debe esto loquis?

-Nada, solo quería sentir tu cuerpo friito porque me estoy muriendo de calor- me separé de el e hice un gesto de calor con la mano.

-Te creere mi pequeña loca- dijo tomando mi mano para caminar.

-Sabes... eres muy difícil de encontrar- le mire saltando.

-Solo poquito- sonrió de lado.

-Encontré un lugar en el lago que esta hermosísimo y no se lo he dicho a nadie, te lo digo a ti porque quiero que vayamos para pasar tiempo juntos, a solas sin nadie que nos moleste, que dices quieres ir a verlo ahorita?

-Contigo iría hasta el fin del mundo- dijo para luego depositarme un beso tierno.

Lo lleve corriendo hasta el lago, quiero volver a ver ese lago subterráneo, no pude haber encontrado un lugar mejor para estar con el chico que adoro. Y se que a Nico no le gusta el agua pero se tiene que acostumbrar, porque bueno yo soy hija de Poseidón y el agua es parte esencial para mi. Lo aventé al lago y después yo me lancé y le dije que se sumergiera y el acepto de mala gana como ya sospechaba, le puse una burbuja de aire alrededor de su linda cabeza hueca y le señalé el camino que tome hasta ese lugar afrodisíaco, paramos en una roca en la que nos sentamos pues el camino es un poco largo y cansado para alguien que no es hijo del dios del del mar.

-wow... que lugar tan... tan hermoso- dijo Nico admirando el lugar subterráneo. -¿co... como lo encontraste?

Me encogí de hombros y le respondí. -un día me puse a nadar y pude ver que había una abertura y mi curiosidad me hizo seguir hasta aquí- hice un ademán con las manos señalando todo el lugar. -y quiero compartirlo con la persona que más amo, seguido de mi mami claro- dije en un tono divertido.

-Ven aca mi preciosa loca- dijo antes de darme un beso lleno de amor.

Ese beso fue aumentando un poco de ritmo, muchas veces hemos tenido ese tipo de besos apasionados, pero este era diferente, sentimos una gran necesidad de el uno al otro, cosa que era un poco raro para mi, nunca me había sentido tan necesitada por tener sus labios contra los mios, era una sensación que me agrada y me da un poco de miedo. Nico bajo de mis labios hasta mi cuello, lo que causo en mi unos escalofríos que me gustaban. Nico estaba mojado y por otro lado yo estaba seca gracias a mi poder de decidir si mojarme o no. Pero con la cercanía de mi novio, con su ropa toda mojada me daba frio pero poco a poco se fue convirtiendo en calor un calor exquisito. Mientras volvía a basar a mi novio, el bajaba sus manos lentamente hasta mi cintura alzando un poco mi camisa del campamento, pero al darnos cuenta de lo que casi estaba a punto de pasar nos separamos y pedíamos perdón al unísono, estamos avergonzados por lo que casi sucedía, solo nos mirábamos con un nerviosismo, nunca habíamos llegado tan lejos. Pero sabíamos que los dos estábamos muy afectados por lo que acaba de pasar y solo nos abrazamos.

La Sombra y El Mar 2 (Nico di Angelo y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora