Mi piso parece un psiquiátrico: 1

90 10 9
                                    

- ¡Despierta, perezosa! - Dijo Mei agitando de los hombros a Cheezz, quién dormía plácidamente. Cheezz gruñó y le pegó un bocado en la mano.

- ¡Ay, asquerosa, te voy a arrancar el pelo de guarra que tienes! - De pronto, Cheezz saltó y se puso de pié en su cama.

- Ni se te ocurra. - Dijo con los ojos muy abiertos e inflando los mofletes.

-Vale, vale, pero venga, que hoy es el primer día. -

Cheezz la miró haciendo una mueca. ¿Qué primer día? ¡El de instituto! ¡Se le había olvidado! Cheezz pega un salto de parkour, que sale mal, y se da con la muñeca en el librero. Genial, sangre.

Se levanta y coge su uniforme. Se lo pone. Parece un payaso, le queda enorme. Bufa y se quita al flequillo morado de la cara.

Se había tintado el pelo morado con mechas verdes, y además, se lo había conseguido tintar a Mei pelirrojo fuerte, como si fuese sangre con tonos azules, como un pitufo ensangrentado.

Hace su mochila y se va a por el desayuno. Pasa corriendo por la habitación de Mei, pero se vuelve atrás al ver una imagen... Mei haciendo twerck con la canción de "Bang Bang". Cheezz la mira sin expresión alguna. Le dice:

- Haz tu propio baile. - Hace algo raro con el cuerpo y sale corriendo a la cocina.

Cuando termina de tomar el desayuno, chilla "Meeeeeeeeeeiiiii, baja, zorra."

Mei baja cantando ¿una canción japonesa?

- ¡K-K-K-Kawaii! - Chilla.

- ¡P-P-P-Puta! - Chilla Cheezz como una loca.

Mei hace una sonrisa para bajo y le mira con los ojos abiertos. Era la mirada de "Que te viole un lacasito". Cheezz la mira con la boca en forma de "o" y los ojos fuertemente cerrados. La cara de "Prefiero un bol con chocolate".

Suena la campana del instituto, se miran y salen corriendo: van a llegar tarde.

- ¡Espabila lentorra! Que con el paso tortuga que tienes tres o cuatro horas en llegar. - Gritó Mei, subiendo lo más rápido que le permitían sus piernas, aquella escalera que parecía no tener fin.

Cheezz arrugó la nariz, mordió su labio inferior con dos de sus dientes tipo conejo y entrecerró los ojos. La cara de "Ayúdame guarra, que me estoy muriendo".

Al parecer Mei no captó el mensaje, pues quedó mirando fijamente a la peliverde mientras se creaba un silencio incómodo. - ¡Joder, pero que me estoy desangrando! ¡Ayuda! - Lloriqueó Cheezz.

- ¿E-Eh? - Titubeo Mei, mientras miraba atontada el rastro de sangre que habían dejado. ¿Acaso Cheezz no se curó la herida antes de salir?

- ¡Ah! Iré a la enfermería... - La pelirroja se giró, e inmediatamente se dispuso a bajar las escaleras.

No se sabe si fue porque era por la mañana, o porque tenía prisa y /estaba muy nerviosa/, pero acabó chocando con Cheezz, y en cuestión de segundos, se encontraron rodando escalera abajo, acabando hechas un desastre.


Mi piso parece un psiquiátrico.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora