Mi Luna

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Escena del capítulo anterior

-No es nada, no te preocupes- dijo dando por terminada la charla -Creó que es hora de irnos Sango, ya se esta haciendo tarde-

-Esta bien- dijo no muy convencida.

Cabalgaron nuevamente hasta el castillo a descansar para el día siguiente ya que en mañana partirían rumbo a las tierra del Norte.

Capítulo 4 "Mi Luna"

En la mañana

Kagome despertaba lentamente por los tenues rayos de sol que entraban colándose por las cortinas de su ventana, parpadeó un par de veces para acostumbrarse a luz y se estiró, se sentó en la cama aún adormilada y con su cabello todo revuelto.
Escuchó que tocaron suavemente la puerta.

-Adelante- se acomodo un poco el cabello y se restregó los ojos.

La puerta se abrió y dió paso a su madre que traía puesto un hermoso kimono de tres capas
color rojo fuego, con flores de sakura doradas bordadas en la terminación de las mangas y en el obi.

-Buenos día Kagome- saludo con una tierna sonrisa.

-Buen día madre- la joven princesa le devolvió la sonrisa.

-hija, ve a arreglarte que muy pronto partiremos hacia el norte, llamaré a Sango para que te ayude a alistarte-

Kagome sólo asintió levemente mientras se sentaba en el borde de la cama.

-Tu padre y yo te estaremos esperando en la sala- dijo dándole un beso en la mejilla.

-Si madre-

Cuando su madre se retiró ella dejó escapar un suspiro y se dirigió al baño para darse una relajante ducha con sales aromáticas.
Cuando término de ducharse se envolvió en una tolla y al salir se encontró con Sango, la cual traía entre sus brazos un hermoso kimono color lila, bordada con flores de mismo color pero un poco más oscuras en la parte del cuello y las mangas, se lo puso y amarró su cabello con un moño.

-Estas muy hermosa Kagome- dijo Sango -Me costo un poco escogerte un atuendo ya que tienes una enorme variedad de vestidos y kimonos- comentó.

-Si lo se y todos son regalo de mi padre- la joven de ojos zafiro sonrió al recordarlo.

-Ya es hora de que bajemos Kagome-

-Hai-

Bajaron a la sala en donde sus padres la esperaban.

-Te ves hermosa hija- su padre la abrazó y le dió un tierno beso en la frente.

-Gracias padre-

Luego de que todas las maletas fueron llevadas al carruaje fueron rumbo a las tierras del Norte.
Kagome en todo el transcurso estuvo metida en sus pensamientos mientras sus manos jugaban con el dije que su amado le había regalado por su cumpleaños cuando sólo eran unos niños.

Flash Back

En un hermoso jardín estaban dos niños, se veía a una pequeña niña de cortos cabellos azabaches y ojos azul zafiro esconderse de de un niño de largos cabellos plateados y ojos dorados. Un hermosos cuadro.
La niña que aparentaba unos 6 años huía del niño que tenía unos 7 años.

-Encuentrame y te diré por que estoy enojada- se escuchó el grito de la pequeña.

El chico comenzó a buscarla en el rosal, detrás de los cerezos, cerca del estanque, en la pagoda y no encontró a la niña, su búsqueda continúa hasta que recordó que a ella le gusta estar en el puente cerca de las orquídeas.

-¡Te encontré Kagome!- le dijo el niño al encontrarla sentada abrazando sus rodillas.

La niña lo miró con lágrimas en sus ojos.

-¡Olvidaste mi cumpleaños!- gritó y salió corriendo alejándose del niño.

Esa misma tarde la niña regreso al jardín pero no encontro al niño con quien jugaba, ella siguió llorando entre las orquídeas cuando algo la distrajo.

-Nunca olvidaría tu cumpleaños Kagome, nunca- la niña de giró y vio al niño por quien lloraba tras ella con una pequeña caja azul en sus manos -Era de mi madre... Ahora es tuyo-














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⏰ Última actualización: Mar 06, 2016 ⏰

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