Una situación algo incomoda y nuevas amigas.

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Capítulo 2

Una situación algo incomoda y nuevas amigas.

Ya habíamos llegado a los terrenos de Hogwarts, la situación en la que nos encontrábamos era realmente incomoda, todas las miradas de las personas presentes estaban puestas en mí, algunas me miraban con confusión y extrañeza o como la del chico castaño, un poco tímida. Ninguna de las personas que se encontraba en la carrosa había emitido algún sonido parecido a una palabra durante el viaje.

Bajamos de la carrosa de la misma manera en la que viajamos, en silencio, así durante todo el trayecto hasta llegar a las puertas de castillo, en el momento en el que entramos el niño regordete que venía con nosotros salió disparado hasta el Gran Comedor, algo verdaderamente extraño.

Al llegar al ahí pude observar algunas caras conocidas como la de Arthur Weasley, fue el prefecto que conocí el día de mi ceremonia de selección, algún que otro profesor conocía como el profesor Slughorn, es el jefe de la casa de Slytherin y es profesor de pociones; caminamos hasta la mesa de color dorado y escarlata y nos sentamos a esperar que los de primero fueran seleccionados a una casa y el director diera el discurso de bienvenida y compensara el banquete.

Los chicos presentes comenzaron a hablar de las cosas que hicieron en las vacaciones mientras que la chica pelirroja que estaba hablando con James cuando llegue se sentó junto a mí.

Pasaron algunos minutos y me di cuenta que la chica pelirroja comenzó a entablar conversación con una chica pelinegra que estaba en frente de nosotras así que me puse a observar con detalle el lugar.

El lugar era cálido y al entrar ahí pareciera que te estuviera dando un abrazo de bienvenida, había comida de todos los tipos, desde postres hasta pizza y jugos de calabaza, limón, frutas en general. Estaba una chimenea enorme a un costado de la mesa de Griffindor donde estaba decorada con algunos trofeos y guirnaldas horrendas, todo esto estaba iluminado por velas que flotaban en el aire y arriba de esto había un techo hechizado para que pareciera que no estuviera.

Estaba tan concentrada en los detalles de Gran Comedor que o me fije que la chica pelirroja me tocaba el hombro.

-¿Eres nueva cierto?-pregunto la chica.

-Si-respondí- Clarie, un gusto en conocerte-dije.

-El gusto es mío-me dirigió una sonrisa- mi nombre es Liliane pero todos me dicen Lily y ella es Alice- dijo refiriéndose a la chica pelinegra quien me saludo con la mano.

Nos conocimos un poco y hablamos tonterías hasta que el director Dumbledore se levantó de su asiento para dar la bienvenida a los estudiantes.

-¡Bienvenidos!- exclamo el hombre de barba blanca-¡Bienvenidos a un nuevo año en nuestra amada escuela!, Hogwarts siempre los recibirá con los brazos abiertos. No solo le doy la bienvenidas a los alumnos de años anteriores, también le doy la bienvenida a nuestros nuevos estudiantes de primero y a una no tan nueva estudiante que nos acompañara desde tercer año. ¡Recibamos con un fuerte aplauso a Clarie Potter!-el Gran Comedor se llenó de aplausos y todas las miradas se posaron en mí y sus caras eran de sorprendidos pues nadie pensaría que el maravilloso James Potter tuviera una hermana.

Los aplausos cesaron y la comida desapareció de nuestros platos y el director dio la orden a los prefectos de dirigirnos a las salas comunes correspondientes a cada casa.

Mi hermano y sus amigos subieron a sus habitaciones al igual que Lily y Alice yo sin embargo me quede unos minutos más, pues quería recorrer por mi cuenta la sala común, mañana recorrería el resto del castillo.

Había sillones de color escarlata y decoraciones en dorado por todo el lugar, resultaba fascinante la adoración que le tenían al quidditch, tenían trofeos, medallas y banderas del equipo de quidditch de Griffindor. Vi el reloj que se encontraba colgando en la pared y decidí irme a mi habitación porque ya era muy tarde.

Subí las escaleras de caracol y llegue a la habitación que tenía mi nombre. Liliane Evans

Clarie Potter

Alice Smith

Abrí la puerta lentamente, no me quería llevar una sorpresa de lo que pudiera estar adentro de la habitación, he conocido varios magos y brujas algo extraños. Realmente no preste mucha atención a los nombres que se encontraban en la puerta por lo tanto me lleve una gran sorpresa, bueno no para tanto.

Entre a la habitación y allí se encontraban Lily y Alice, Lily se encontraba leyendo un libro sobre la cama que se encontraba a un lado de la ventana y Alice se encontraba organizando su baúl, las miradas de las dos adolescentes se posaban en mí.

-Ah, eres tú –dijo Lily

-Si... -dije algo confuso por la manera en la que me lo dijo.

-No le preste atención –dijo Alice – Esta así porque no le cae muy bien tu hermano, de echo lo odia.

-La mayoría de tiempo es odiable, no la culpo-dije. Alice se acercó a mí hasta llegar a una distancia donde Lily no escuchara.

-Entre nosotras –susurro- No le creo mucho de que lo odia, es muy orgullosa.

-Alice ya sé que están hablando de mí, no tienes que susurrarlo-dijo Lily. Alice ignorando olímpicamente a la pelirroja me hiso una seña para que fuera la cama.

Decidí que mañana arreglaría mi baúl en verdad fue un día muy alocado, me puse el pijama y me metí a la cama, mis compañeras de cuarto ya estaban dormida así que sin más remedio caí en los brazos de Morfeo.

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