Lo sé porque ha cambiado el decorado porque estamos bombardeando las paredes. Porque están siendo testigos de un cambio repentino de temperatura.
Tormenta de las que dejan un olor toda la semana, de las que nunca terminas la película. De las meriendas dulces, de discusiones amargas.
De resaca,
de agujetas,
de quedarme afónica.