Rufo se siente triste porque no lo aceptan en el pueblo, no tiene amigos y tampoco casa.
Rufo siguió andando solo dar tres pasos el pitufo de antes le dijo
-Menga ven, pero tendrás que trabajar para comer-
Rufo le responde- Haré lo que sea.
Rufo empezó a trabajar para poder comer.
- Oye-dijo el pitufo- Te tendré que presentar a los demás
-Fortachón, Presumido, Bromista, Gruñón, Pitulinda y yo soy Tito Pitufo.
-Encantado- dijo Rufo
Podemos comer.
-Sí vamos anda.
Al final de tal palo ta la astilla.