Capitulo 17

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Las horas habían pasado de manera lenta, tan lentas que no provocaban mas que irritación, logré entregarle los documentos a Cristopher segundos después que Kenia se retirara de las instalaciones, vi la hora en mi muñeca y me sorprendí al ver que eran las 7:00 pm en punto, decidida a irme caminé hacia la oficina del Sr Cooper para avisarle que me retiraba.

Toqué tres veces con mis nudillos la puerta, esperé unos micro-segundos cuando escuché por fin su voz permitiéndome pasar.

-¿se le ofrece algo señorita Agron? - preguntó guardando algunas cosas en unas cajas pequeñas para luego colocarlas en un estante que se encontraba a su derecha de su escritorio, cuando acomodó la última me miró de nuevo.

-es hora que me retire por hoy - avisé, él me sonrió causando que mi corazón empezara a palpitar como loco, pero con mucho esfuerzo logré estabilizarlo.

-bien, gracias por haber venido hoy Chelsea - dijo finalmente, habían ocasiones que me llamaba "señorita Agron" y otras como esta solamente "Chelsea".

-me agrada que me llame Chelsea - pensé

-bien, con permiso.

-¡espera! - gritó, me paré en seco y volví su mirada hacia él, retrocedí cuando noté que se estaba acercando rápidamente a mi.

-usted... - empezó - usted aceptaría si en algún momento del día la invitara a tomar un café - plateó - ¿c-conmigo? - me quede helada, totalmente paralizada, no podía terminar de asimilar lo que acababa de decirme ¿acaso el sería capaz de invitarme a salir?

-yo...yo - tartamudeé - y-yo me tengo que ir, con permiso - dije, y salí de su oficina casi corriendo, mi pulso estaba explotando y no sabía el porque, él tiene novia y por eso no lo... ¿aceptarías? ¿quiere decir que si estuviera libre le correspondieras?

Miles de preguntas se formaron en mi mente, y mis nervios no me ayudaban en nada, me obligué a tranquilizarme al llegar a la oficina de Jullie, ella se encontraba arreglando sus cosas para luego apagar la luz de su escritorio, ella notó mi presencia y me limitó a observarme con el ceño fruncido.

-¿que te ocurre Chelsea? - preguntó.

-te lo cuento cuando estemos solas - dije - ¿nos vamos? - pregunté, ella asintió con la cabeza y salimos de la oficina.

........

Llegamos a un restaurante humilde, con comida realmente deliciosa pero humilde, nos sentamos en una mesa para dos y mientras esperábamos a que nos tomaran nuestra orden decidimos empezar a hablar.

-y bien - dijo Jullie - ¿empezarás tu o que?

Di un largo suspiro y la miré, tenía ambas cejas levantadas y su mirada fija en la mía, ¡vaya que si sabía que escondía algo! - bien - empecé - yo vengo de una familia muy humilde... - continué contándole todo hasta que al fin sentí que llegaba al final de todo este drama, Jullie solo me veía atentamente mientras hablaba - ...y esta en un hospital un poco grave - concluí, ella me miró atenta antes de decir algo.

-¿trabajaste por mucho tiempo en ese lugar? - cuestionó, asentí con mi cabeza, no era algo que me haga sentir realmente orgullosa - dijiste que...conociste a Ernesto trabajando en ese bar, y ¿él te sacó de ahí?

-me ofreció el puesto de secretaria de Cristopher cuando se enteró sobre los medicamentos de mi abuela, ahora trabajo más en la oficina que en el bar.

-¿y tu jefe te lo permite?

-no ha dicho lo contrario, aunque hay que tenerle mucho cuidado a ese señor - dije, ella se limitó a responderme con una "O" dibujada en sus labios - he dicho todo sobre mí Jullie, ahora ¿podrías decirme que ocurre entre el señor Sifontes y tu? - pregunté de la nada, vi como se ponía extremadamente nerviosa, sonreí.

Esto iba a ponerse bueno.


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