Capitulo 5 (Sam)

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Mi primer día fue súper genial. Después de esperar a mi hermana para venir a mi casa. Me acosté un rato pensando en aquella chica Paulina, es tan preciosa, sus ojos dorados, me encantan, sus pecas en todo su rostro me matan, su sonrisa perfecta me enamoran y uf esos labios color manzana roja, me derriten. Es wow extremadamente perfecta, sin palabras. ¿Será que me estoy enamorando? ¿Por primera vez? Dios no dejo de pensar en ella. Mi hermana me saco de mis pensamientos.
Pamela: hola hermano, como te fue?
Le sonreí y conteste.
Yo: perfecto, el mejor día de mi puta existencia, hermanita.
La abrace y le plante un beso en su cabellera.
Pamela: a que se debe? Debe de ser algo fuerte para que estés así...
Yo: bueno... Es que hermana....
Pamela: Habla bastardo!!!! Me tienes con el jesus en la boca idiota.
Yo: Oyemeeee, bueno, creo que me atrae alguien, no se si me guste, pero es preciosa, hermana.
Le dije con una gran sonrisa en mi rostro.
Pamela: diosss, mi hermano enamorado y no de Sarah? Debe de ser jodidamente preciosa esa mujer, para que te guste.
Pamela río.
Yo: si hermana, es tan preciosa, se llama Paulina.
Pamela: tengo que conocer a mi cuñada.
Yo: y a ti, hermana?
Se quedo en silencio unos segundos.
Y respondió.
Pamela: de la patada, por lo menos uno de los dos salió feliz...
Mi sonrisa se volvió en una cara preocupada.
Yo: Que paso hermana? Alguien te hizo algo??
Ella me responde confundida.
Pamela: no hermano, nadie me hizo nada, creo, la verdad es que cuando me presentaron delante de todos los idiotas del salón, un grupo de niñas, comenzaron a susurrarse y unos tipos me chiflaron.
Sentía como mi sangre hervía, al escuchar a mi hermana sacada de onda.
Yo: veras que mañana, todos te querrán.
Pam, sonrío.
Pamela: eso espero
Yo: veras...
Mi hermana me abrazo y me dio un beso en mi mejilla y susurro en mi oído un gracias, te amo.
Ella salió de mi habitación, se fue a la suya.
Yo seguía pensando en mi amada paulina, en verdad, no podía sacármela de mis pensamientos. De repente mi teléfono vibro. Vi la pantalla y era mensaje de mi pequeña Sarah.
Sarah: Sam, me hiciste falta hoy, no hablo de sexo, si no como un gran amigo, besos tu pequeña Sarah.
Sonreí, Sarah cambio el " mi amor " por el "gran amigo", al fin pudimos ser amigos de verdad, ya que yo si la quería como amiga. Decido responderle.
Yo: también te extraño pequeña, gracias por entenderme, me encantaría ser amigos.
No tardo para contestarme.
Sarah: ya te quiero ver, adiós, te amo.
En verdad estaba mas que feliz, conocí esa chica y ahora Mi pequeña Sarah amiga mía.
Yo: igual, te amo, pequeña Sarah.
Ya no espera respuesta, me quede pensando en pau, y quede dormido.

Mi primer amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora