Noche 1

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¡Nueva historia!

*Celebra con serpentinas*

*Le miran raro*

Bueno, esta historia va dedicada a una friend.. Bueno..a todo el que le llame la atención el posible Ferid x Mika.

Advertencia: Universo alterno.

Pd: Perdonen las faltas de ortografía.

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La habitación era de un color salmón gastado mientras que cortinas de un rojo chillón adornaban el cutre lugar. La cama, que era vieja y polvorienta, rechinaba y se movía bruscamente. En ella, dos cuerpos realizaban el acto más puro que hay entre dos seres humanos o al menos, eso parecía.

-L-lo estas haciendo muy fuerte.-Un rubio replicaba tratando de no sonar molesto al no sentir un buen trato, el no era de esa... clasificación.

-Ahh...-Suspiró exitado el que lo penetraba.-..Cállate pequeña perra, vine aquí para satisfacerme no para ser gentil.

Mika solamente calló y se resignó durante todo el acto mientras acallaba sus quejas mordiendo el dorso de su mano, no quería que otro cliente se perdiera por sus reclamos.
.
.
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Luego de un tortuoso tiempo, el tipo había culminado. Mika rápidamente se dirigió al baño, pero antes de entrar volteo a ver al tipo, el cual ya se había vestido.

-Tienes que pagar en recepción una cuota extra por haber sido muy ru--

-¿Pagar más? Hablas como si este chiquero fuera un prostíbulo de cinco estrellas.

-Esas son las reglas, Kimizuki. Si no las obedeces, llamaré a seguridad.

El pelirrosa se levantó de la cama y caminó hacia Mika para luego, abrazarlo por la espalda.

-Está bien, lo haré por ti, tu vales oro. Si por mi fuera dejaría a la bruja que me espera junto con esos demonios y vendría a cogerte todos los días.

Mika en su interior se retorcía de la ira. Todo lo que su cliente tiene y no aprecia. Lo que él daría por estar con su familia más tiempo...Aunque sea un momento.

-Como voy a pagar más, creo que podríamos--

-No, tu tiempo ya ha acabado, debes esperar hasta que un turno esté libre.

Kimizuki agarró de la muñeca a Mika bruscamente mientras lo arrastraba hacia la cama. Mika se exaltó al ver el repentino cambio de animo del tipo.

-¿¡Es que no lo hago bien?! ¿¡Necesitas más para satisfacerte como una verdadera zorra?!

Mika se safó del agarre y corrió hacia una cómoda que se hallaba en un rincón del cuarto.

-¿¡A dónde crees que vas?!

Corrió en dirección a Mika. Pero al llegar a él, sintió una punzada eléctrica y todo se oscureció para él.

-¡Te dije que se acabó tu tiempo!-Mika sostenía en sus manos una pistola eléctrica, agradecía que le hubieran dado una para tratar con este tipo de clientes.

Odiaba quedarse tiempo extra en ese lugar ya que la única persona, aparte de él, era un simple guardia. Pero lo necesitaba, necesitaba el dinero.

-¡Seguridad!-Gritó Mika mirando hacia la puerta, pero nadie entró. La persona, que yacía en el suelo semi inconciente, se estaba moviendo.

Mika salió del cuarto en busca de los guardias, pero no estaban. Miró a los costados y logró divisar a uno de los guardias de último turno al final del pasillo, pero estaba dormido.

-Lo que me faltaba...-Susurró molesto el rubio.

Estaba a punto de caminar hacia el guardia, cuando sintió una mano sosteniendo su tobillo, haciendolo caer.

-No huyas!-El pelirrosa había reaccionado antes de lo previsto por el rubio.

-¡Suéltame!-Mika pateaba la mano del hombre, tratando de safarze, cosa que logró en poco tiempo.

El rubio trató de correr lo más fuerte que le permitían sus piernas pero desgraciadamente, el dolor en su trasero se volvía más fuerte.
¿Irónico no? A pesar de haber tenido infinidad de clientes, aún dolía.

-¡Ven aquí!-Mika sintió un fuerte tirón y luego, la frialdad del suelo. Kimizuki esta vez se había colocado sobre él.

-¡¡Segu--

Una mano evitó completar el desesperado llamado del rubio.-¿Sabes lo exitante que sería cogerte en frente de una persona?-Susurró con un deje de lujuria en su voz.

El contrario no hacía más que patalear y tratar de morder la mano del que yacía encima suyo. Kimizuki trataba de bajar su propio pantalón con una desesperación inhumana.

El rubio solo se calmó y dejó de evitar lo inevitable. En realidad no importaba, no tenía nada que perder... Solo que nunca le había atraído este tipo de trato.

-Bien, ahora..-Mika solamente cerró los ojos con fuerza, tratando inútilmente de no soltar lágrimas de frustración.

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¿Y bien?¿Cómo quedó?¿Les gustó? :3

(Ojalá esta vez si salgan los guiones largos, no bajé este teclado para nada >:I )

Fuck! •Owari no Seraph•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora