Vero.
Pasaron los días y cada vez venía menos mi novio a verme, mas bien, casi nunca. Aaron me decía que lo dejara, que no merecia la pena estar con ese idiota. Pero aquí estoy, saliendo con un idiota que no me a venido a ver al hospital en las dos semanas que llevo aquí. Mi mejor amiga tampoco a venido a verme mucho, vino un día y no me llama por teléfono ni nada. El otro día me hicieron unas pruebas y me dijeron que pronto me harían una quimioterapia. Con mi madre, estoy bien, viene poco ya que trabaja muchas horas y tal, así que bueno, Aaron me hace bastante compañia. La comida aquí es un asco así que cada vez que viene mi madre le digo que me traiga galletas de chocolate para Aaron y para mi. Aaron me presentó el otro día a amigos suyos del hospital y conocí a una chica con la que hize buenas migas. Se llama Jennifer y tiene 17 años, tiene cáncer desde hace tres y dice que le queda poco de vida. Al escuchar eso se me rompió el corazón pero aún así estoy unida a ella.
Hoy es jueves y Aaron a salido para ver si conseguia una bolsa de patatas. Yo estoy viendo una pelicula en la tele que nose como se llama, pero esta interesante. Pasados unos 15 minutos llega Aaron con 2 bolsas de patatas y una coca cola.
- Mira lo que tengo.- dijo sonriendo y muy contento.
- Dios, que hambre.
Fui para el y le intente quitar una bolsa pero la escondio detrás suya.
- No no, antes quiero algo a cambio.
Relajate, ya estas de los nervios.
- Y que quieres?
- Un beso.
QUE?! COMO?! TRANQUILIDAD. RESPIRA.
- Que?
- Un beso, en la mejilla.
Vaya susto, creo que estaba roja porque me ardía la puta cara.
- Ah.- y se lo di. Dios tiene la cara suave y huele súper bien. Vale, bajadme del paraíso.
- Ala toma.- y me tendió la bolsa.
- Gracias.
Nos acostamos cada uno en nuestra camilla, y nos pusimos a ver la película que estaba viene antes. Cuando acabó me si cuenta de que Aaron estaba frito, así que me puse a mirarlo. Joder, era tan guapo, se veía tan pacifico, tranquilo, todo un ángel...
- señorita López, le están llamando.- dijo la enfermera que acababa de entrar.
- UPS, voy...
Me puse las zapatillas que me regaló mi madre cuando vino, unas de conejitos, y me puse rumbo a la sala de las llamadas. Me senté con la ilusion de que fuera mi novio, mi madre o mi mejor amiga. Pero no, era una voz desconocida.
- Hola, mira seré breve, hoy e visto a su novio con una chica que era su mejor amiga, estaban basándose y muy agarraditos, hasta se metian mano, le digo , que deje a ese chico, porque no soy la unica persona que lo a visto ni la primera vez que lo que visto, lo siento mucho.- y colgo. No me lo creo, tengo que llamarlos. Regreso a mi habitación y le digo a la enfermera que si no tiene telefonos pequeños para dejarlos en la habitación, me dijo que si y me lo dejo en la mesita de en medio de la camilla de Aaron y la mía.
Se iban a cagar.
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Tenias que ser tu.❤
RandomVero es una chica de 17 años que tiene una grave enfermedad de la que nadie sabe de ello. En una revisión a su médico le dicen que tiene que ingresar en el hospital de inmediato, ya que si no se trata ha la enfermedad acabará muriendo... Luego está...