-El cuerpo de Zack Risson fue encontrado el día de ayer en el puente levadizo de Miami, la autopsia esta siendo realizada en este momento, sin embargo, el preeliminar advierte que es el mismo modo operandi de Angel- Comenta Rosio la asistente regordeta al equipo del FBI.
-¿se ha encontrado alguna nota?-pregunto el más joven de los investigadores, León.
-Si, la nota contenía la frase "Me dieron la oportunidad de vivir o morir, y tal fue mi miedo que en vez de creer en que lo lograria, con desesperacion metí la bala en mi cráneo" .
La sala quedó en total silencio después de las palabras de Rocío, que acababa de leer del reporte del oficial Vargas, quien fue quien respondió al llamado del asesinato del hombre, aunque todos ya se sabían de memoria aquellas palabras, pues como aquel hombre que se había destrozado el cráneo al tirar del gatillo, ellos se lo destrozaban al tratar de entender la mente retorsida de Ángel, lo único que cambiaba era la persona.
Cada uno de los presentes estaba perdido en su mundo, vaya a saber uno en que, pero algo era seguro todos miraban fijamente las fotos de la "obra" de Ángel, ya eran 15 muertes en tan sólo 3 meses, todas torturadas de formas tan sádicas que los palestinos estarían encantados de escuchar para poder practicar con sus cautivos para obtener información, era poco probable que cualquiera de las víctimas decidiera vivir, pues vivirian de formas tan deplorables, y tendrían problemas tanto físicos como psicológicos, que sólo alguien con gran apego decidiría vivir, y sabrá sólo Dios que pasaría si así lo decide.
-Lamento la interrupción pero los medios están aquí, y estoy segura que no se irán hasta conseguir una declaración- comentó la bella recepcionista mientras entraba sin tocar.
-No me importa ni en lo más mínimo ellos, daré mi declaración cuando yo considere que sea apropiado, y jamás vuelvas a entrar sin tocar- ladró Tom Collazos el jefe en mando del equipo.
Después de aquella interrupción inapropiada, Tom decidió hablar, y le mando una tarea a cada uno de sus compañeros, ninguno renegó, ni dio peros, sólo asintieron y uno a uno abandonaron la sala, dejando sólo a dos personas dentro, a Tom y a Matias Zambrano, Matias era el más callado, pero el más meticuloso, y acertado, este caso como a todos lo tenía perdiendo los estribos, bajo sus ojos se veían las bolsas, que delataban las pocas horas de sueño, tenía una barba de 3 días que lo hacia ver mucho más maduro a pesar de sus cortos 24 años, era delgado pero musculoso, se veía desde lejos el amor que le tenía al gimnasio, y Collazos sabía de ante mano que así era, pues se la pasaba entrenando cuerpo a cuerpo en las instalaciones del FBI cada que tenía el tiempo, sus facciones inquirian respeto, y derretían a las mujeres, de todas las edades posibles, mientras que Tom, era el caso a parte, el era muy alto, con barriga cervecera, un bigote algo gracioso, músculos que a pesar de sus 45 años aún no perdían del todo su forma, un hombre realmente bien conservado, eso si, sus facciones lo delataban, era un hombre frío y calculador, al verlo más que respeto infringía miedo, pero que en su campo, ayudaba mucho, así que no le molestaba en lo mas mínimo, y no se molestaba si quiera en sonreír para cambiar un poco el pensamiento de todo aquel que se le quedaba mirando.
-Se nos esta saliendo de las manos debo admitir, Ángel resultó ser un verdadero dolor de culo, ella no es sólo una sádica, ella es el diablo en persona- dijo serio Tom, no estaba nada feliz de admitirlo ciertamente.
Al comienzo de la investigación, se creía que era un hombre, caucásico de 30 años aproximadamente y con problemas psicologícos, el ignoto sólo había matado una vez, claro esta de que una forma tan sádica y mordaz, que psicopata se queda corto, después de una semana y 3 cadáveres más, los agentes del FBI empezaban a preocuparse al no encontrar pista alguna, hasta que el 18 de marzo, un viernes soleado todo cambio, al parecer el ignoto se canso de no tener ni una sola pizca de reconocimiento y junto al cuerpo de la víctima número 5 había una pequeña nota adicional a la que normalmente estaba, la cual decía, "he de admitir que me decepcionan, esperaba más, y sobre todo me han sobrevalorado, no soy hombre, mucho menos de 30 años, a quien tanto le temen, y a quien buscan es de uñas finas, ojos vivaces y un cuerpo que a cualquiera vuelve loco, a que me creen el diablo, pero no, yo soy un Ángel, el Ángel de la muerte.
Al día siguiente los diarios más importantes tenían como enunciado a El Ángel De La Muerte , todo era una locura, ahora todos temían por sus vidas, y no justamente por un hombre, sino por una mujer llamada Ángel.
-Necesitó pruebas, necesitó el maldito cuello de esa perra en mis manos, y tu Matias me ayudarás.
El joven mantiene su postura, lo único que cambia es que pega sus labios de tal forma que firman una línea recta, se sentía alagado por el hecho de que su jefe le confiara tal cosa, pero no podía dejar de pensar en como haría para tener las pruebas que no había conseguido durante 3 largos y tenues meses.
-Te estarás preguntando, el ¿como?, pues resulta, gracias a mís fuentes, que esta sádica no trabaja sola, ella es sólo la punta del iceberg, y por eso quiero que entres a su círculo, será mis ojos y oídos.
Matias estaba bien con ello, había trabajado encubierto para narcóticos antes, no tenía familia, y eso aunque lo hiciese sentir sólo lo dejaba concentrarse al 100% en su trabajo, así que sólo se apresuró a dar una inclinación de cabeza, dando a entender a Collazos que lo hará.
Lo que ellos no sabían es que Ángel ya sabía que alguien la había traicionado revelando su ubicación y dejando que alguien del FBI se infiltrara, y ese hombre lo había pagado caro, pues a el no se le dio la oportunidad de vivir o morir, como a sus demás víctimas, y mientras ella estaba sentada en su silla de cuero regalada por el mismo Chapo Gusman, recordaba con una sonrisa amarga la muerte de Fabio, quien rogó por su vida, pero igualmente término implorando su propia muerte, se sentía traicionada y decepcionada, no sabía como había puesto sus manos al fuego por el, por fortuna ya sabía que el lunes llegarían nuevos reclutas, y entre ellos estaba el infiltrado, primero se divertiría, y luego lo mataría lenta y dolorosamente, como le gustaba, ese hombre no sabía en lo que se había métido, pensó mientras veía el tarro transparente en el cual reposaba inerte la lengua de Fabio.
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Angel De La Muerte
Action-Escoje, morir o vivir- dijo aquella hermosa mujer con una sonrisa irónica mientras le tendía en una mano un 9 milímetros, y en la otra un moderno iPhone 6. -Morir-tomo el arma y sin esperar más se incrustó la bala en su cien. -Cobarde-susurro la mu...