Zodiaco

Compañeros de habitación

Todos los nuevos estudiantes estaban reunidos en el patio central del colegio, cada uno tenía su respectivo equipaje, las chicas de un lado y los chicos de otro, como si pensasen que ambos grupos difícilmente podrían mezclarse, a pesar de ello todos hablaban sin cesar, el suelo era de mínimas baldosas de un color morado intenso que se veía interrumpido por una majestuosa fuente en todo el centro del patio central rodeada de bancos. En el lugar en que terminaba el suelo empezaba el cielo, nubes multiformes adornaban los alrededores del colegio. En cada uno de los extremos había un farol antiguo, seguramente databan la edad del colegio, que a decir verdad parecía bastante antiguo pero aun así bien conservado. Parecía un colegio como cualquier otro, claro está obviando el hecho de que todos los alumnos eran inmortales y que estaba ubicado el cielo. Mientras todos estaban hablando no se percataron de que se aproximaba la subdirectora acompañada del director, a decir verdad, ella tenía una actitud más imponente que él, daba un poco de miedo, pero eso ha ayudado a mantener el orden en el colegio durante todos sus años de existencia, no es que sea mala, es que por necesidad debe serlo.

¡Silencio! -Gritó estruendosamente la recién llegada subdirectora, seguidamente todos voltearon abismados hacia ella y se mantuvieron en silencio-

Buenos días jóvenes, ya he leído sus cartas de presentación, todos han sido admitidos en el colegio -Afirmó el director mientras los analizaba a todos uno por uno tratando de identificar quién era quién, una vez que los jóvenes escucharon la noticia gritaron de emoción a lo que la subdirectora les interrumpió nuevamente-

Las reglas son simples jóvenes, de lunes a viernes ven clases, aun estamos ajustando qué tipo de clases serán. Por otra parte, y como era de esperarse, los cuartos serán separados, niños con niños y niñas con niñas, además serán en parejas. No hay mucho más que decir, pueden recorrer todas las pero nada de salir de ellas de lunes a viernes o sin previa autorización ¿De acuerdo? -Preguntó retóricamente la subdirectora al grupo de alumnos-

Eso es correcto, el desayuno, almuerzo y cena será en el comedor, y si se encuentra a una niña en el área de los niños o viceversa serán castigados severamente -Completó tranquilamente, a pesar de ello se podía sentir en sus palabras y en su mirada que el castigo podía llegar a ser bastante severo para esa determinada infracción, vaya a saber Dios por qué-

Finalmente les diré la ordenación de las habitaciones -Dijo mientras sacaba de uno de sus bolsillos un pequeño trozo de papel un poco arrugado y con la tinta un poco corrida, de seguro tenía mucho tiempo allí dentro o lavaron el pantalón con el trozo de papel dentro del mismo- Bien, aquí está, Aries compartirá la habitación 1A con Géminis, Tauro con Cáncer en la habitación 1B, Leo con Escorpio en la 2B, Virgo con Libra en la 2A, Sagitario con Capricornio en la 3B y por ultimo Acuario con Piscis en la 3A.

Realmente esperamos que su estadía aquí sea bastante grata y que les proporcione el aprendizaje que vienen buscando. ¡Pueden retirarse cómodamente! -Tras estas palabras el grupo de jóvenes se dirigieron a sus respectivas habitaciones, un nuevo mundo con nuevas personas les esperaba, todos están a la expectativa, podría no ser todo tan bueno como parece ser-

Habitación 1A:

Hola, yo soy Aries, tú debes ser

Soy Géminis, ¡Un placer! -Dijo sonriendo mientras le tendía la mano a su interlocutora-

Igualmente -Dijo la pelinegra estrechándole la mano- Espero que nos llevemos muy bien, no sé por qué pero siento que compartiremos esta habitación durante un largo tiempo

Pareciese ser así -Dijo clavando sus azules ojos en los de Aries- Por cierto, me genera cierta atracción el gris de tus ojos, me parece bastante llamativo para una pupila