Capítulo 2.- Conociéndonos

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  "Tener o no un final feliz depende de dónde decidas detener la historia."  

Orson Welles


Todo estaba oscuro, inclusive parecían que las voces se escuchaban a lo lejos, no sabía lo que pasaba, sentía su cuerpo temblar frenéticamente como si algo se hubiera apoderado de ella, no había hacia donde moverse.

Su vista comenzó a acostumbrarse a la oscuridad y por fin pudo notar a un par de figuras que se encontraban alrededor de ella.

- ¿Quieres vienen? – preguntaba una de ellas, su voz parecía el de una mujer mayor.

- ¿De qué está hablando? – Alguien más contestaba, esta vez la voz parecía de una voz joven

-Son estupideces de una loca – La voz de un hombre retumbaba en el elevador

- ¿Cómo te llamas? ¿quiénes vienen? – esta vez la voz fue de un hombre que se acercaba a su cara, de cabello claro y tez blanca.

-Me llamo Regina- contesto la pelirroja con voz quebrada y apenas manteniendo la compostura – Antes de llegar al edificio me perseguían, podía verlos, eran varios siguiéndome, no humanos – Continuo con la respiración cada vez más agitada, Karin llevo su mano a la boca asustada por lo que escuchaba.

El elevador retumbo un poco y comenzó a subir, fue aproximadamente cinco segundos y paro de nuevo. Regina se cubrió los ojos con miedo.

- ¿Van a creer esas estupideces? – dijo Pirro frunciendo el ceño y estirando la mano para tocar el botón de emergencia del elevador.

-Noooo...! – Dijo Regina levantándose para impedírselo – No saben que estamos aquí – explico alterada mientras el mismo hombre que se le había acercado hacia un momento pasaba su brazo por sus hombros, Karin sujeto a Pirro negando con la cabeza para que desistiera.

El hombre de tez clara la soltó y tomo su caja de herramientas para buscar algo, sacando después una linterna portátil – esto puede servir un poco para alumbrarnos – dijo encendiéndola - ¿tú eres? – pregunto Pirro con voz altanera – Me llamo Jasón, vine a hacer unos arreglos a varios letreros publicitarios del edificio – contesto Jasón apuntando con la luz a Pirro y después a los demás – Quizá si nos presentáramos esto sería mejor – comento.

-Soy Karin – dijo levemente Karin, aun un poco asustada por lo que estaba pasando.

-Me llamo Betty y él es mi nieto Adam – se presentó la mujer mayor abrazando al pequeño que parecía muerto de miedo.

-Pirro... -dijo simplemente y con frialdad, no parecía interesarle en lo más mínimo aquellas personas ni lo que sucedía.

-Ahora, ¿puedes contarnos que paso? – Dijo Jasón tratando de hablar con la voz suave para que Regina no se pusiera peor.

-Esta mañana me levante como todos los días, pero había algo diferente, el cielo se veía diferente, Salí y fue cuando me di cuenta que alguien me seguía, entre al edificio para ocultarme, pero sentí claramente como había algo en el ambiente, debieron sentirlo también, era como un gas, por un momento sentí que me desmayaba, pero logre seguir de pie y fue cuando los vi, muy delgados y como de 2 metros de alto, venían hacia a mí, corrí por los pasillos y choque contra alguien, así que seguí corriendo por las escaleras – llevo sus manos a los ojos – no sé porque me seguían a mí, hablaban pero no entendía nada, querían que me acercara, decían que estaban aquí para apoderarse de todo – dijo mientras sus lágrimas salían y el elevador retumbaba de nuevo, Betty soltó un pequeño grito.

-Cuando estaba en la oficina, me pareció escuchar un grito –Dijo Karin haciendo memoria - ¿Eras tu Regina? – pregunto y Regina negó con la cabeza – No he gritado, fue alguien más quien grito, alguien que no escapo – explico.

-Fue lo que vimos en el cielo abuela – Dijo Adam viendo a su abuela y esta negó con la cabeza.

- ¿Qué vieron? - Pregunto Jasón de Inmediato.

- Nada... Adam me dijo que vio algo negro en el cielo cuando veníamos, pero yo le dije que había sido un avión, el insistió en que no...pero...tenía que ser un avión ¿no? – Dijo Betty tratando de mantenerse fuerte para su nieto, aunque no lo conseguía del todo.

-Ven! Se los dije! ¡Están aquí! – Regina exclamo con fuerza, como si ahí estuvieran todas las pruebas del mundo – y ese gas, estoy segura que algo tiene, me siento débil, lo respiraron también – menciono cuando el elevador comenzó a bajar varios pisos, Regina ahogo un grito, sonó la campana de llegada al destino, pero la puerta no se abría, algo golpeo con fuerza la puerta del elevador y Karin dio un salto para atrás con miedo.

-pero que... - menciono Pirro en voz baja, para el nada de aquello tenía sentido, ni las explicaciones de Regina, ni lo que estaba pasando, Karin fue hacia los botones y oprimió el de un piso más arriba, haciendo que el elevador subiera, dejando los golpes alejados, Adam comenzó a llorar y a pedir por su mamá.

-Tenemos que salir de aquí – dijo Jasón con el ceño fruncido.

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⏰ Última actualización: Apr 10, 2017 ⏰

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