III

49 2 0
                                    

-¿Este vestido está bien no?- dijo mostrándome un vestido color morado escotado.

-Si.- conteste.

-¿Qué te vas a poner tu?

-El azul.- dije agarrándolo y mirándolo.- está sencillo pero bonito.

-Si me parece bien.

*****

-¿Ya viste quién está en la fiesta?- dijo mi amiga señalando a Ethan.- ve a hablar con el.

-No voy a hacer eso.

-El no te quita la mirada de encima.

-No es cierto.

-Claro que sí y viene en camino.- dijo dándome la vuelta.

-Hola...

-Hola Alice.

Esperen ¿qué? ¿Alice? Mire hacia atrás y vi a Alice Johnson saludándolo, y sonriéndole. Ella pasó a mi lado dándome un empujón y quinta dome del camino. Me dirigí al lugar donde estaba mi amiga.

-¿Cómo te fue con Ethan?- dijo alzando sus cejas con una mirada picarona.

-No era a mi quien miraba.

-¿Qué? Pero si yo misma vi que no te quitaba la mirada.

-Pues viste mal.

-Ven, vamos a seguir disfrutando de la fiesta.

Lo que me pasó hace unos minutos con Ethan fue espantoso. La fiesta tomaba un rumbo muy bueno, todos bailaban y se divertían. Aunque algunos más que otros. Me encontraba observando a mi amiga que bailaba con un castaño.

-Sabias que cuando estás aburrido, es más fácil que te entre el mal humor.

-¿Enserio?- la verdad no sabia ese dato.- Soy Grace.

-Harry.

-Te más haces familiar Harry, ¿te he visto en algún lado?

-Tal vez.

-¿Te acabas de mudar o que?

-No sólo vine a dar un pequeño paseo, me encontraba aburrido, de pronto pues vi esta fiesta y entre; haber que había de bueno.

-Esta divertida, pero la verdad ya estoy aburrida.

-Creciste mucho, y ya la diversión no es lo mismo que antes.

-¿Crecí? ¿A qué te refieres?- el ya no estaba ahí, así de la nada había desaparecido.

Después de eso, le avise a mi amiga que me iba ya a casa, la verdad estaba súper aburrida ( aunque me fuera caminando), me iría. Al salir de la gran casa, camine unas cuatros cuadras. No estaba tan oscuro como pensaba; todavía se encontraba con vida la ciudad.

Cuando llegue a la casa nadie se encontraba en ella. Lo primero que hizo fue subir a mi cuarto, cuando entre se encontraba la puerta abierta y una sombra se asomaba. Al prender la luz la sombra se fue. Quite mis zapatos, me puse la pijama. Apague la luz y me metí en la cama.

-¿Sabías que si dejas de creer dejas de soñar?- solté un grito, esa voz me asusto muy feo.

-¿Quién eres?- me levanta rápidamente de la cama. Estaba buscando la luz, y la verdad me estaba desesperando; ya que no la encontraba.

-Alguien...-Cuando por fin encontré la luz ese "alguien" ya se había ido; la ventana estaba abierta y las cortinas se mecían.

Hoy fue un día de locos. Así que decidí irme a dormir.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Dec 26, 2015 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Pan ||H.S||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora