El engaño de Christian Grey. ªº

Capitulo 24

«Anastasia Steele»

Christian... Christian esta aquí, parado frente a mi con una mirada gigante de amor, en su mano derecha trae unos tulipanes de color rosa los cuales extiende hacia mi. Yo los recibo y me acerco a Christian dándole un beso que nos hace terminar en el cuarto, el esta encima, mío, besandome.

-córrete nena...

Entra y sale de mi, siento como el esta dentro mío, siento nuestro sudor resbalando entre nosotros. Grito afirmando que he llegado al orgasmo, pero Christian no se detiene, sigue y sigue, hasta que me comienzo a alertar, comienzo a empujar a Christian, pero en toma mis brazos poniéndolos encima de mi cabeza.

-ya Christian... Ya....

-feliz aniversario.-me dice en mi oído rozándome con sus dientes mi oreja.

De un momento a otro estoy en el cuarto de juegos, estoy en el suelo, estoy sola. Comienzo a inspeccionar la habitación, notando que todo esta en su lugar, todo, pero me percato de algo, es como... agua, bajo mi mirada a mis piernas en donde siento mucha agua, pero veo que hay sangre, mucha sangre, y no veo mi vientre grande, si no, esta plano, como cuando estaba antes de que me embarazara. Me alerto, y toco mi vientre, pero algo o alguien toca mi espalda, sacándome un fuerte grito a un inmenso dolor que me provino de mi espalda. Volteo y esta Christian. Trae de la mano a Paris, y ella carga a un bebé. Me quedo viendo a París y un grito atroz me desgarra desde dentro. Paris comienza a reírse y me dice:

-feliz aniversario.

-¡NO!¡POR FAVOR!¡NO!

Despierto gritando. Gritando de miedo, lo primero que veo es mi vientre, mi abultado vientre, en el cual, si se encuentra mi bebé. Relajada, me recuesto nuevamente en mi almohada. Pero, el miedo no se va, no se va ese temor que me dio en cuanto soñé aquello. No permitiría que le pase nada a mi bebé, nada. De pronto recuerdo el sueño, creo que nunca podré olvidarlo, el se veía tan... real, se veía tan malvado. Se veía sumamente enojado. Con este silencio, simplemente me da más miedo que nunca, debo dejar de vivir sola, lo cual no será en mucho tiempo. Volteo a mi reloj y veo que son las diez cincuenta y dos, Emiliano llegará en cualquier momento.

Nuestro aniversario. Hoy es nuestro aniversario, esa fue la causa de mi horroroso sueño, hoy Christian y yo cumpliríamos un año de casados, sin pensar que sólo llegamos a diez meses de aniversario, mundialmente debería ser el matrimonio más corto, mi alma de destroza al pensar eso. Aniversario más corto, diez meses y un cachito. Cuando en el altar nos prometimos muchos aniversarios y siempre estar juntos. ¿Por qué lo cambiaste todo Christian?, yo... yo quería estar contigo mi vida entera, y ni siquiera fue un cuarto de ella.

Me levanto de mi cama, mostrando algo de mareo, me detengo un momento aúlle tandeo el mareo, pero al quitarse el mareo veo que he terminado delante de mi espejo, allí me puedo ver... tengo mi enorme vientre, mi cabello exageradamente muy desordenado, mis ojos con unas pequeñas ojeras amenazando en salir más grandes, me doy vuelta, todavía pudiendo ver mi reflejo en el. Ahora es mi espalda, me levanto un poco mi blusa y veo unas grandes cicatrices, cicatrices, es lo único que dejan las personas en la vida cuando te lastiman fuertemente. Levanto la vista a mi rostro y veo grandes lágrimas, cayendo como ríos salvajes amenazando a inundar el mundo. Las cicatrices, son de ese día en que Christian me llevo a su cuarto de juegos, pero las lágrimas perduran, estas lágrimas son las mismas que tuve el día que me entere de el engaño de Christian Grey, son las mismas cuando una chica me disparo, son las mismas de siempre. El engaño, el día en el que el me engaño , lo recuerdo firmemente, recuerdo todo, recuerdo a Jack, exigiéndome que me largara a mi casa, recuerdo el taxi en el cual subí, recuerdo al conductor que traía un bigote de unos cuantos días, tes morena y acento mexicano, recuerdo en maldito mensaje, que me hizo correr a mi casa, recuerdo la cara de Gail y Taylor en cuanto llegue al apartamento, recuerdo como estaban Christian y Paris al tener sexo en mi propia cara y cama. Recuerdo todo perfectamente, recuerdo el mensaje... ese mensaje que me hizo correr a casa para saber si era cierto lo que decía en el. Tomó mi celular en mis manos, buscando en mensaje de ese día, el cual encuentro después de los mensajes de Christian. Abro el mensaje y leo:

PRIVADO. 08:45am.
Se qué tu no me creerás, se que tu piensas que tu esposo es la persona más leal del mundo, yo sólo quiero protegerte y ayudarme a mi misma. Corre a tu casa, por que tu esposo en la cama con otra esta.

Como ese día, tapo mi boca, evitando gritar callen do grandes lágrimas, calle do sin parar, caigo al suelo, pero ya no puedo más, comienzo a gritar, seguido de un fuerte dolor en mi vientre, el cual no se quita. Comienzo a preocuparme en cuanto veo mi bata manchada de sangre. Tomó mi celular y le llamó a una persona...

-hola...

-ven rápido...

-¿Ana? ¿Qué es lo que pasa?

-por favor... corre.

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Se qué tal vez me quieren ahorcar por tardar tanto y por que el capítulo no es muy grande que digamos.

"Escribe sí eso te hace feliz" eso fue lo último que dijo. Pero, estos días han sido sumamente complicados. Prometo no tardar para no dejarlas con el trama.

Las amo. Besos

-G