CAP.12

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Narra Mishell

Regrese a la habitación, sonreí inconscientemente al ver que mi querido hermanito había levantado mi desastre.

Tome mi celular en lo que iba a mi tocador.

Tres mensajes de Nick y una llamada perdida

Luego le llamaré a ese loco.

Al verme al espejo, mi boca forma una "O"
¿Qué desastre hizo con mi sensual rostro, Cami?

No importa, es sábado y... no se, pero, no quiero salir, jugaré algún vídeo juego en cuanto regresen mis hermanos, debería decir: Trillizos pero se escucha mejor hermanos.

Me levante del tocador y note que se encontraba algo tapado con una gran manta en el baño, estoy entre ignorarla y seguir buscando el suministro de sabritas, mantecados, helado, soda, chocolates y dulces de Cameron, tan deliciosas frituras ... ¿en qué estaba?

¡Ya me acorde! Ver que es lo que se encuentra ahí dentro.

¿Cual era el dicho que me decía mamá de pequeña?

"La curiosidad mató al gato"

Yo solía contestarle sonriente mente "Pero el gato murió sabiendo la verdad"

Tiré de la sábana y vi a Jaden, mis ojos se centraron en los suyos, ese estúpido mono capuchino.

***Flash Bag***
Tan solo era una niña inocente...

-Cami, necesito a tus simios

-Mono Capuchino

-Eso.-apunte al mono que se encontraba en su cabeza.-

Me lo entregó y fue bajando las escaleras de su cuarto mientras me explicaba paso a paso sobre como cuidarlo.

-Te dejare sola por dos horas con Wallace y Wilfrido, los vas a cuidar con toda tu perra vida

-Hey, solo tengo doce años y solamente e besado a siete chicos esta semana, no le veo nada malo a eso, osea hermanis cualquier niña de mi edad hace eso ¿cierto Chase?

Chase me ignoro y siguió caminando con su libro de cuentos en la mano.

Lo mire feo y dirigí nuevamente mi atención a Cameron.

-El señor y la señora Capuchino están con el viejo señor Weiner que se encarga de los animales de papá, en resumen, están en el ganadero de papá

Chase alzó la vista del libro y se digno a hablar por fin.

-¿Qué está haciendo el querido señor Weiner aquí? Se suponía que se había ido de viaje a Centroamérica para actualizar su diplomado de veterinario

- El ruquis truquis vino por una llamada especial que mande a hacer porque Margaret dio a luz a dos hermosos bebés capuchinos: Jaden y Edwards

-Que rápido piensas los nombres, ¿no crees que ya son muchos simios los que tienes en tu cuarto ?-Chase y Cameron se miraron con furia por unos segundos, yo los ignore e inicie a jugar con mi vestido.-

-Algo

-Ummm, bueno, has lo que quieras pero no se si Mishell sea apropiada para cuidar a tus orangutanes, son muy traviesos

Chase desacomodo su cabello, sacó una galleta de su bolsillo y se fue en busca de mamá para preguntarle sobre que eran los duendes y porqué venían en los cuentos.

Dos horas después de estar cerca de Wallace y Wilfrido me habían hecho considerar muy bien las palabras que había dicho Chase.

Mi cuarto parece una porquería...

Encerré a esas dos amenazas con seguro en mi precioso cuarto.

Sigilosamente baje las escaleras y el señor Weiner estaba por el pasillo.

-Señorita Carrington, muy buenas tardes, de casualidad ¿no vio cerca de acá a el joven Cameron?

-Disculpe, pero no

-Me tengo que ir, sería un placer si le entregara esta canasta a Cameron y esta nota a su padre.-me tendió un sobre de color crema que dudosamente acepte.- Hasta luego señorita, sea cautelosa con esa canasta, lo que contiene es muy lindo, el hermano mayor de Darien vendrá a cuidar a los bebés...

-¿¡Darien y Ryan están en la ciudad!?

Mi corazón dio un vuelco y latía desenfrenada mente, ¡mi amor Ryan vendrá!

El me lleva tres años, es sumamente alto, guapo, cariñoso, leal, lindo, amable.

¡Es el chico perfecto!
¡El chico de mis sueños!

En mi ataque de locura, el señor Weiner trono sus dedos enfrente de mi rostro.

-Hasta el otro mes, señorita Carrington, trate de no asustar a mi hijo en la primera semana.

Estúpido anciano que tiene mas mujeres que el novio de mi muñeca.

Subí a mi cuarto, destape la canasta y di un gritillo de ternura por esas dos cosas peludas.

Haber, creo escuche a Cami decir que uno es Jaden y otro es Edwards.

*Treinta minutos después*

¡Odio a cualquier cosa que chille como un bebé!

¡Nunca tendré hijos!

¡Juro usar protección!

Todo mi cuarto tiene desperdicios sanitarios de las bolas de pelos.

Ese bastardito de Jaden me traerá problemas, lo noto en la forma tan aferrada y seca en la que me mira.

***Fin del Flash Back***

El simio ya no estaba en la jaula, busque por todo rincón de la habitación y nada.

Estaba a punto de impactar mi cuerpo contra la cama, ya rendida, cuando escuche el chillido insoportable de esa cosa.

Se encontraba en mi espalda, colgado de mi cabello, jalando de el, pasando su babeante lengua por todo mi brazo.


Holi lectores!

Y ahora ya saben más sobre el origen de Jaden y el pasado de Mishell, si les gusta este tipo de historias con Flash Back me dicen y ubico más su pasado.

Cualquier falta de ortografía, lo corrijo después, muy buenos Días/ Tardes/ Noches/ Madrugadas/ Atardeceres, donde sea que me estén leyendo, besos!!!!





Los trillizos...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora