Era por aquel entonces un pequeño chiquillo de aproximadamente 4 años, ( exacto la edad donde nadie toma en cuenta tus ganas y voluntad) era también mi cumpleaños y por ende sabía que vendría gente a la casa a festejar un año más de vida ... Pero y que carajos con ello si yo lo que necesitaba era jugar y gritar - un niño necesita desahogarse- las presiones de la vida a esa edad son más que envolventes. Como había mencionado con antelación mi voluntad valía tres kilos de nada y antes de permitirme hacer " lo mío " con mis amiguitos ... Fui obligado a saludar a esas personas mayores que por cierto ni conocía, ni me importaban, y que no figuraban en mi vida. Recuerdo aquel momento puesto que me marco de manera extrema hoy bien lo se dadas las consecuencias... Hacia mí se acercó una señora gorda, con la cara marcada por el acné y las esperanzas colgando en cada bolsa de los ojos ( vaya que desde entonces era observador) me tomo con las dos manos grasientas y grandes de la cara, abusando de mi espacio personal y fue ahí que me planto de la manera más grotesca el beso que más recuerdo en mi vida, el primer contacto con el sexo opuesto, la situación más incomoda y para la que a uno no lo preparan en la escuela... Olía a comida ( guácala de perro ) y encima no sé de qué extrañas costumbres estaba ella amañanda puesto que según se... A un niño no se le besa en la boca ... Desde entonces y por aquel Suceso toda la vida he preferido a los hombres, esa barba que roza al contacto, esas manos que saben tocar puesto que en la entre pierna... Se cuenta con lo mismo... Mi madre y padre desde aquel momento en que me encontraron de la mano de un muchacho me han retirado la palabra y es que si tan solo supieran que la culpa es de ellos por obligar a mi voluntad 😔😔😔😭😭😭😭soy solo una historia más o a menos a si lo imagino.
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Vida en el abismo
ActionRelato pronto de una realidad que se pospone a lo largo de los recuerdos !!!por que cuando la vida llega, uno es el menos preparado para darse gusto!!!. En fin en brevedad, hablare de relatos nunca tan cotidianos y siempre tan repentinos... Donde l...