—Hey tu levantate!—
Dipper por fin despertaba después de una larga noche de pesadillas, y solo para encontrar que aun continuaba en una.
—vamos vamos, el amo te quiere presentable para el—
Dipper no quería levantarse, quería seguir durmiendo y nunca despertar, le dolía el cuerpo y aun peor se sentía humillado.
El pequeño sirviente levanto a Dipper y lo arrojo a una tina llena de burbujas.
—¡splash!—
Dipper rápidamente tuvo que levantar la cabeza para no ahogarse.
—Limpiate bien y come algo, el amo vendra pronto—
Dipper comenzó a restregarse el cuerpo sin mucho entusiasmo, pero al menos el baño lo hacia sentir un poco mejor.
Encima de una pequeña mesa se veía una bandeja con el desayuno mas repugnante que Dipper pudiera haber imaginado, había algo que sin duda aun estaba vivo.
El demonio hablo:
—Nos vemos después juguete—
Y procedió a retirarse.
Dipper, lo siguió con la mirada vacía, hasta darse cuenta de un detalle que lo despertó por completo:
No había cerrado la puerta.
Dipper estaba anonadado el demonio había olvidado cerrar la puerta, quizá una trampa quizá una provocación, pero era una oportunidad y el pensaba aprovecharla, rápidamente salió del baño y busco sus ropas, pero no las encontré por ningún lado, lo único que alcanzaba a ver era un traje totalmente negro camisa saco pantalón el cual por su puesto no era de su agrado, pero al no haber nada mas en el cuarto tuvo que ponérselo.
Dio un ultimo vistazo al desayuno que tenia enfrente y al ver algo moverse desecho totalmente la idea de comerlo, así que decidió simplemente ignorarlo y sufrir el hambre que tenia, abrió ligeramente la puerta esperando que no hubiera nadie afuera, y al no ver ningún ser demoniaco la abrió y se escabullo rápidamente.
—tap, tap, tap-
sus ligeros pasos no hacían demasiado ruido sin embargo sus nervios le hacían sentir que cada uno se oía como si tuviera enormes botas, fuerte y penetrante.
Doblo una esquina y logro ver a dos guardias frente a un a puerta, Dipper solo logro pensar que por aquí no llegaría mas lejos, tenia que averiguar como salir de esa dimensión y rápido.
Lo único que se le ocurrió fue seguir avanzando hacia la otra dirección, cuando escucho pasar a algunos monstruos alcanzo a esconderse detrás de una maceta, y en una segunda ocasión dentro de un extraño ropero.
—jamas lo lograre!— se decía a si mismo, cada vez mas hambriento.
Una vez mas se forzó a seguir avanzado, hasta oír la voz de dos seres conversando entre ellos.
—¿como es la cosa que tenemos que capturar?—
—Tu sabes, es uno de esos humanos de la dimensión de la tierra, es como un blorghx pero sin bello y menos brazos—
—y debe ser capturado o aniquilado?—
—Torpe!, es el juguete del amo, si lo dañas sin su permiso te destruirá, así que no lo dañes!—
Los demonios se alejaban mientras seguían discutiendo.
—Así que Bill ya noto mi escape—
Dipper sabia que tenia muy poco tiempo para escapar si es que había alguna manera de hacerlo, sus fuerzas rápidamente lo abandonaban, después de todo el maltrato que había sufrido la noche anterior