Amigos [JiKook]{OneShot}

Sweet Birthday

Desperté totalmente soñoliento por la mañana.

Para mí fue como abrir los ojos cualquier otro día, no era consciente de nada diferente. La luz entraba por las cortinas, los perros ladraban, los autos pasaban, el mundo seguía girando a mí alrededor.

Tenía tanto sueño que no sabía cómo me había despertado y quería seguir durmiendo, no tenía fuerzas para levantarme aún. Me escondí bajo las sabanas y cerré los ojos otra vez.

Mis músculos se relajaron y sentí cómo la oscuridad me iba invadiendo poco a poco. Con la respiración suave, fui cayendo lentamente en brazos de Morfeo. Pero no llegué al final.

—¡Feliz cumpleaños!

Aquel grito me hizo saltar en la cama, mi corazón estuvo a punto de detenerse por completo. Por suerte aún soy joven y mis órganos funcionan perfectamente bien.

Había olvidado completamente que un día como hoy nací hace dieciocho años. Vaya que he sido despistado.

Me hubiera enojado con quién osaba a interrumpir mi sueño si no fuera mi mejor amigo, que a demás es mayor que yo. Con él no podía enrabiarme, lo apreciaba demasiado para desperdiciar nuestros momentos con enojo.

—¡Feliz cumpleaños! —repitió Jimin—. Levántate, tenemos un largo día para entretenernos.

Estuve a punto de mandarlo al diablo, pero me contuve. En el fondo sí quería pasar mi día haciendo cosas con él.

—Qué tan largo puede ser... —balbuceé, sentándome en el colchón y sobando mis ojos. Alargué el brazo hacia donde se supone que estaba mi teléfono. Con la vista empañada miré la hora—. ¡¿Qué?! ¡Jimin! ¡Son recién las ocho de la mañana! —lloriqueé.

—Te dije que sería largo —canturreó mientras se lanzaba encima mío.

No podía respirar, y menos con las cosquillas que comenzó a repartir por todo mi cuerpo. Reí, o mejor dicho, chillé, como un maldito becerro.

—¡Quítate, estás muy gordo! —grité, pero él sólo se removió aplastándome más—. ¡Por favor! ¡Duele de verdad!

—Bueno, bueno. —Se puso de pie y se acercó a la puerta. Me miró desde ahí, con una expresión en el rostro que me hizo detener la respiración—. Estás tan grande Kookie, ya eres un adulto. —Su voz sonó nostálgica, algo que me pareció muy conmovedor—. Ahora vístete que saldremos a pasear.

Sonreí.

Me devolvió la sonrisa.

Suspiré.

Salió de la habitación.

Me quedé unos segundos mirando la puerta cerrada. Luego, me levanté y empecé con el ritual de aseo y arreglo de mí mismo.

Cuando estuve listo fui directo a la sala principal, donde se supone que nos juntamos todos los chicos para cumpleaños y reuniones. Esta vez, cuando llegué, sólo estaba Jimin.

—Qué apuesto te ves. —Fueron las palabras con que me recibió.

Miré al suelo para evitar que notara más de la cuenta mi sonrojo. Obviamente sabía que él no lo decía con esas intenciones, pero aun así no pude evitar que mi cuerpo reaccionara ante su cumplido.

—Igual tú, hyung —le devolví para no crear una atmósfera tan extraña—. ¿Y los demás?

—Algunos salieron; otros, simplemente siguen durmiendo. Pero no te preocupes, quiero que esta mañana sea sólo para nosotros. Ya en la tarde podrán tenerte ellos. Ahora sólo es 'mañana de mejores amigos'.