los 5 elementos

cap. 33

Se observan dos personas encapuchadas al entrar a un pueblo de la legión de la tierra entrando a él después de caminar 3 casas se detuvieron en una en especial, dejo uno de ellos pasar al otro primero tocaron la puerta.
-Ya voy, ya voy -
Se abre la puerta y se ven a las dos personas encapuchadas con la mirada baja
-¿Quienes son?, sí son de la legión del fuego les juro que los dejare como...-
Uno de ellos se acerca a ella, se deja ver por la anciana
-Señora Ming soy yo Yugui-
-Mmmmm como no te voy a reconocer muchacho pero pasa llamas demasiado la atención -
Lo deja entrar junto con su acompañante
-¿Quién es?, agh espero que no sea Anabel esa niña me cae muy mal y lo sabes, no me gusta que la traigas aquí-
-No señora Ming no es ella-
Se descubre el rostro el encapuchado y es Tavata
-Mucho gusto en conocerla señora Ming, soy Tavata -
Le estira su mano para que la estreche
-Oh, esta niña es muy diferente a Anabel, bienvenida hija mía, que bueno que Yugui cambio de parecer, sabía que no estaría con ella mucho tiempo, Yugui siempre fue un tonto en escoger una buena mujer- todo esto lo decía mientras que entraba a una habitación donde seguramente ahí preparaban los alimentos, Yugui suspiro
-Por eso no quería venir-
-Vamos no es tan mala, la verdad es que es una buena mujer -
Yugui se sienta en una de las sillas de la mesa y deja a Tavata parada, la señora Ming viene con una charola en las manos, con varios alimentos, mira a Tavata que está parada y ve a Yugui que está sentado aburrido, deja la charola en la mesa y le da un golpe en la cabeza, Yugui se soba la cabeza
-¿Qué no te enseñe modales muchacho?-
-Aaaaahu, ¿qué?-
Le da otro golpe
-¿Porqué dejas a Tavata parada?-
Ella solo no intenta morirse de la risa, se sienta ella sola, ya que al parecer no había ningún caballero
-Déjelo señora Ming, no importa mucho -
-Oh, mi niña que linda eres y en cuanto a ti-
Le da otro golpe en la cabeza, Tavata ya no aguanto más y comenzó a reírse
-Aaahu-
-No se que es más gracioso la señora Ming corrigiendote o tu cara tan graciosa que ponés cuando recibes el golpe-
-Ja-ja, que graciosa, si tu no eres la que estás sufriendo-
-lo siento es que es muy gracioso-
La señora Ming empieza a darles de comer, al terminar Yugui se quedó sentado, Tavata y la señora Ming lo miraron, hasta que la señora Ming gruño y se llevó los platos al lo que debería de ser dónde preparan los alimentos, Tavata hizo lo mismo y al estar ahí algo le sorprendió a la señora Ming
-Oh, muchas gracias hija, nose que le pasa a esa cabeza dura, pero me da gusto que lo hayas encontrado por fin alguien que le tenga tanto cariño y tanto amor-
-De hecho señora Ming, el fue quien me encontró de mi escondite-
-Oh, que tierna eres querida, pero no me llames señora Ming, llamame nana-
-Está bien nana -
La señora Ming la mira detenidamente, hasta que su facción de su rostro cambio a una curiosa
-Te veo diferente-
-¿De qué habla? -
-Te vez preciosa...es solo que...dime querida ¿estas bien en tu período? -
-Oh...yo...-
-Mira querida subiendo las escaleras al estar arriba hay una puerta ese es el baño por si quieres entrar-
Tavata sale rápidamente de ahí y sube las escaleras lo más rápido posible, Yugui solo la observaba
-¡Tavata! ¿Qué tienes? ¿Pasa algo?-
Ella lo ignoro por completo, entro a la habitación y cerró la puerta la bloqueo por dentro, se miro al espejo
-No, no, no, no,...pero...-
Acaricio inconscientemente su vientre
Que tal si...mi periodo debió de empezar tres días después de que mi papá...de que me fui de la casa...no...no...no lo puedo creer
Salió de la habitación
-Tu habitación está del lado derecho del baño querida-
Tavata solo tenía la mirada perdida
-¡Tavata! ¿Estás bien? ¿Qué te paso?-
Tavata solo cerró la puerta sin decirle ni una sola palabra, se recargo en la puerta, se deslizó en ella hasta llegar al suelo, donde su espalda queda recargada en la puerta, mirando al vacío
No...no...no se...no...puedo creerlo...
Mientras que en el comedor
-¡Tavata! ¡TAVATA! -
-Déjala en paz cabeza hueca tienes que dejarla pensar, necesita su propio espacio para pensar las cosas -
Yugui subió rápidamente se dirigió a la habitación y abrió la puerta sin avisar, miro a Tavata quien seguía en el suelo sentada con la mirada baja, Yugui entro cerró la puerta y tomo a Tavata de los brazos y la levanto, ella seguía con su mirada perdida, Yugui acaricio su mejilla
-Hey, ¿estás bien? -
Tavata seguía sin contestarle y murmuraba o se perdía en sus pensamientos
-Tavata, ¿Pasa algo? -
-No...no...lo sé-
Yugui siguió mirándola confundido
-Yugui...yo...no...he sangrado -
-¡¿Qué?!.........¿qué significa eso?-
Tavata se quedó sorprendida
-No sabes que significa -
Yugui mueve su cabeza negativamente
-Oh, bueno la verdad es que...no sabría...como explicártelo...y ahora estoy muy...esto es muy complicado y necesito descansar-
-Está bien -
La sienta en la cama le da un beso en su frente y sale de la habitación baja las escaleras y se encuentra a la señora Ming
-Nana ¿qué significa que una mujer no haya sangrado? -
La señora Ming se queda boquiabierta...