Huracán

31 2 0
                                    


Se acabó el mar de leva y los sentimientos encontrados. 

Se acabó la turbulencia, la tormenta, y las aguas inquietas.

Ya no hay ríos de lágrimas ni lagunas de agua salada. 

Se acabó todo eso.

Ha salido el sol y sus rayos los siento como tu sonrisa y su luz la siento como la esperanza infinita.

A ti te siento como el aire, soplando en mi frente a contracorriente. 

Aunque eres más que una simple ventisca, eres una mujer huracanada.

Con la fuerza de los vientos a su favor domina mi pequeño reino.

Y tumba cuanto le place y permite cuanto le gusta.

Es un huracán magnífico, es una mujer magnífica.

Pero los huracanes también se apagan y bajan la guardia. 

Espero que jamás suceda, ni mucho menos partas de mis reinos; si lo haces, llévate tu destrucción contigo, prefiero olvidar tu caos a vivir con la nostalgia de su paso. 

Levanta tus aires, lleva con tus soplidos cada escombro de mi vida. Pero más que eso, llévame a tu desconocido destino. 

Aquel lugar donde tus miradas catastróficas no afectan, donde tus arrasadoras palabras no cortan. Donde pueda soportar tus vaivenes, y la turbulenta vida que queda tras tu paso.


Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 09, 2015 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

ValDonde viven las historias. Descúbrelo ahora