STYLINSON DE NACIMIENTO

#5 Ellos son los mejores

Me miraba al espejo mientras peinaba mi cabello, era el ultimo día de vacaciones, mañana iniciaría mi vida escolar, comencé a notar que mi cabello ya estaba muy largo, pues no lo corte en todo el verano, aunque siempre lo llevo largo, aquel día lo tenia mas largo, era extraño, si mi cabello era largo se rizaba, pero si lo corto bien, se alacia.
Me puse una sudadera y me volvi a mirar en el espejo, comenzaba a pensar en mañana, como me iría en el primer día?, les gustare a las personas?, estoy muy consiente que no sera igual que en la secundaria y eso me asustaba un poco, pero, le veía el lado bueno al asunto, y ese era que Becky estaría conmigo. Frunci el ceño ante mi reflejo, mi aspecto comenzó a molestarme, creó que si quiero gustar a las personas, y si comienzo una nueva escuela, tal vez no estaría mal cambiar...

- ¡Will!- grito Darcy entrando a mi habitación sacandome por completo de mis pensamientos.

- ¿Que pasa?- la niña miro la habitación completa y luego me miro a mi.

- Papi dice que bajes a desanuyar- reí enternecido.

- Se dice desayunar Darcy- le aclare dirigiendome hacia ella, la tome en brazos y salí de la habitación.
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Mi desayuno era cereal, un vaso de jugo de naranja y manzana picada.
Miraba el cereal y comía cucharadas pequeñas, no estaba seguro si eso que se movía era una bolita del chocokrispis.

- Will, hoy iremos a comprar cosas para mañana, vienes?- dijo Louis, mañana regresábamos al colegio, lo tenia muy claro, pero recordé mis pensamiento en el espejo.

- Me quiero quedar, hace dos semanas que no veo a Becky, quiero ver si ya regreso de sus vacaciones- mis padres asintieron comiendo de su cereal, todos desayunabamos lo mismo, no había diferencias, reí un poco ante la escena y luego suspire.

- Que pasa?- preguntó Harry, iba a decir que nada pero tan solo insistiría.

- Bueno...- comencé, Harry le hizo una seña a Louis para que dejara de comer y así los dos me prestaban atención. -Mañana entró al colegio, y me siento un poco inseguro y asustado, es decir, quiero gustarles a la personas, así que...no se, tal vez si cambio un poco, no lo se, empezar todo nuevo, hasta mi aspecto...- lo ultimo lo dije susurrando, tome la manzana picada y comencé a comerla, mis padres estaban callados.

- Bueno, yo creo que mi hijo es el chico mas lindo y apuesto que mis ojos hallan visto- dijo Harry, y luego miro a Louis. -Aparte de ti cariño, claro- río nervioso y luego me volvió a mirar. -Pero por supuesto que creerás que solo te lo digo por que soy tu padre- suspiro. -Y en parte es cierto, pero, Will, solo quiero que sepas que no tienes que cambiar nada para agradarle a las personas, tu puedes llegar a tener muchos amigos, te querrán por quien eres y eres un chico genial, no te agobies por eso, aunque suene cliché...- hizo una ligera pausa dejando la oración sin terminar -Solo tienes que ser tu mismo- dijo encojiendose de hombros.

- Pero si para sentirte seguro, quieres hacer pequeños cambios incluso en tu aspecto, que, aclaro, no le veo nada de malo, también puedes hacerlo- dijo Louis, me quede pensativo, cosa que notaron. -Hijo, es normal que estés nervioso y algo confundido, vas a pasar por muchas cosas en tu nueva vida escolar, cosa que no podremos evitar, y momentos en los que sentirás que el mundo se te viene en cima, pero, eso solo significara que estarás creciendo, y es parte de la vida, esta bien lo que decidas hacer, si es por ti, si es por tu felicidad, esta bien-.

-Cuando te sientas perdido nunca dudes en hablar con nosotros, no te prometo que te daremos los mejores consejos, pero te daremos los mejores para que seas feliz, ya quedara en tus manos tomar la decisión, y sea cual sea, te apoyaremos por que te amamos Will- termino Harry con una cara amable llena de cariño, para ese entonces unas cuantas lágrimas resbalaban por mis mejillas, me sentía tan querido, y el apoyo era impresionante, las limpie rápidamente y reí nervioso, al darse cuenta de mi llanto, mis padres se levantaron y fueron hacia mi, entre los dos me abrazaron y dieron besos en mi cabeza.

- Son los mejores, gracias- dije riendo nervioso, disimulando lo conmovido que estaba por sus palabras anteriores-.

- Nuestro pequeño Larry- dijeron en voz baja-.

- No me llamen así- reí-.
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En la corte...

Tenia la mirada clavada en el piso, no quería llorar, la corte estaba en silencio.

- ¡Si eso no significa que son buenos padres, no se que lo sea!- grito Becky desde el publico.

- ¡Orden!- dijo el juez. -Joven, continúe- asenti.

- Ellos son los mejores- musite. -Así que seguí su consejo...