Pienso en la comida que habrá en el almuerzo, mamá siempre hace carne cuando Federico llega, mi padre, porque él ama la carne y pasarlo así los días que viene. Comemos patatas fritas y nugets.
Nick, Gabe y yo vamos por su encuentro a la estación de buses con el auto de Carla. Nick es obligado a venir solo por su licencia de conducir, a Carla le gusta esperarle en casa mientras prepara el desayuno para Federico.
Él se encuentra esperando sentado, cuando nos ve se aproxima con sus bolsos y la caja de cosas que trae a casa. Él gusta de obsequiar cuando lo vamos a buscar, y ese es el motivo por el cual Gabe viene.
"Cuanto tiempo." Federico saluda a Nick y Gabe respectivamente antes de hacerlo conmigo y abrazarme. "Hola ¿qué tal todo?" Él dice. Tomamos sus cosas y las llevamos al estacionamiento.
"Todo bien." Respondo. "¿Y tú?"
"Agotadísimo por el viaje, pero no me quejo." Reímos, Nick lleva la caja al porta equipaje y Gabe dos bolsos más, dejo las bolsas y un bolso también, y adentramos. "Que bien estar de vuelta." Él se queda con una mochila, así que Gabe sonríe y se acomoda a su lado, enviando al copiloto. "Miren lo que les pase;" Comienza inmediatamente a sacar cosas. Nick enciende el motor, miramos a ambos lados y una vez despejada la área, salimos de ahí. "Este es para Nick." Me tiende la caja a mí para dejarlo junto a Nick.
"Gracias." Él dice mientras gira el auto a su derecha.
"Para Gabe." Le da, Gabe sonríe y la toma para agradecerle y Federico cierra la mochila. "La de Quinn en la casa." Él dice y yo asiento. "No le digan a Carla ni a sus madres ni padres, bueno, menos tú Quinn, a tu padre sí." Reímos, papá es un loco. "Pero ya saben que esto no se comparte información y sean discretos."
"Sí, señor." Décimos juntos, como soldados.
"Nos juntamos después de clases el lunes y vamos al lugar de siempre." Señala.
Todos los lunes, cuando está Federico, vamos a un puente viejo abandonado con el auto de él a charlar y fumar de la marihuana que nos trae cada temporada. Una actividad que llevamos casi un año ya. Y lo mejor de todo es que no nos hemos vuelto unos viciosos de mierda, que era eso lo que él intentó quitarnos la primera vez que nos vio hacerlo, luego probo y se le pego, así que nos reuníamos en aquel viejo puente a fumar y pasar un tiempo. Todo eso fuera de Carla y las familias de Nick y Gabe, obviamente.
Gabe dice que envidia eso de mi porque su padre es un completo político contra les drogas, Nick solo envidia a papá, y es gracioso, muy gracioso.
Al llegar a casa Carla está con la mesa lista, invita a los chicos y desayunamos tranquilamente.
"Kellin ¿Por qué no vamos un rato al skatepark? Me estoy volviendo obeso, como Nick." Gabe dice mientras vemos la televisión. "No es por ofender." Dice a Nick, quién lo golpea en la nuca.
"Sí, sí, está bien." Respondo con una risa, Nick es divertido cuando Gabe le molesta con el peso, pero sabemos que es por lo ansioso que es Nick el que este en esas condiciones.
"Yo también iré, estoy aburrido los sábados." Nick dice, estirando los brazos y bostezando.
Hace mucho no volvía a la práctica en mi tabla y esto equilibraría lo que he subido esta semana de peso. Gabe ya a penas al llegar se lanza a las canaletas para ir al hoyo más grande y comenzar, a mí me gusta ver quiénes andar y lo qué hacen. Nick está a mi lado, sentado y comiendo una bolsa de sufles de papa.
Gabe lo hace muy bien, aún cuando no hemos práctica más de dos semanas. Me despeja mucho el hecho de hacer una práctica así.
"¿No extrañas esto, Nick? A Lara viviendo." Lara es su acompañante, solo que no ha hecho trucos con ella haces meses, negándose a ir a la zona de dos ruedas. Nick es bueno para eso, pero ha tenido inconvenientes con lo que es su madre y la prohibición desde el E15 de su muñeca.
"Sí, más o menos." Como siempre, procura no darle importancia, pero yo sé que le importa y mucho.
